Un nuevo episodio de violencia se vivió en las afueras de un boliche bailable, en la que un joven de tan solo 19 años fue atacado salvajemente y terminó con muerte cerebral. Lautaro Alvaredo es el nombre de la víctima que salió de noche por “tercera o cuarta vez”, según indicó su padre, a un boliche ubicado en el partido de La Matanza.
Todo comenzó cerca de las seis de la mañana del lunes, cuando los amigos de Lautaro fueron expulsados del boliche “Cyrux” de Laferrere junto a otros, por un incidente ocurrido dentro del lugar entre ambos grupos. Como lamentablemente suele suceder, la expulsión de los dos implicados a la vía pública no significó que la trifulca se detenga, sino todo lo contrario.
La pelea entre los grupos continuó afuera del establecimiento y Lautaro quedó solo en el medio, donde fue atacado por dos personas: cuando cayó al suelo, uno de estos dos agresores le pegó una patada en la cabeza y, comprendiendo la gravedad de lo cometido, inmediatamente huyeron en moto del lugar.
Diego, el padre de Lautaro, habló con los medios y explicó que la asistencia médica tardó muchísimo tiempo en llegar: “La ambulancia no venía y un patrullero no lo quería llevar (...) estuvo 14 horas esperando que venga la ambulancia de UTA, todo porque faltaba un papel, que no habíamos hecho la denuncia y que faltaba esto y aquello. Hoy tendría que estar vivo”, remarcó.
Asimismo, Diego Alvaredo declaró que le mataron a su hijo, pero dividió las responsabilidades ya que entiende que una asistencia médica a tiempo lo podría haber salvado: “El culpable es el que le pegó y el segundo culpable es toda la burocracia que hay para mandar una ambulancia de un lado al otro, no se quieren hacer cargo. Me dejaron a mi hijo muerto”, subrayó.
Es que primero Lautaro fue trasladado al Hospital Germani, en Laferrere. Después lo derivaron a la Clínica Mariano Moreno, en el partido de Moreno, donde permanece actualmente internado con muerte cerebral. El médico Alejandro Cilento indicó que en el traslado, Lautaro “presentó varios episodios convulsivos que fueron tratados”, pero que “ingresó con un deterioro de la conciencia profundo”.
Posteriormente, señaló que le hicieron “tomografías de tórax y de cerebro, donde se observaron múltiples contusiones a nivel toráxico, con una contusión pulmonar derecha muy grave y una contusión cerebral grave”, y explicó que ahora “se está tratando de mantener la función de los órganos vitales” tras confirmar el irremediable cuadro de muerte cerebral.
La investigación está a cargo del fiscal Matías Folino de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios Dolosos del Departamento Judicial La Matanza: identificaron a uno de los presuntos agresores que tiene la misma edad que Lautaro, pero que cuando la Policía fue a su vivienda no se encontraba allí.