El acceso al barrio Rincón de Emilio fue este jueves a la noche escenario de un choque entre dos vehículos. Como consecuencia del impacto, un hombre de 39 años y su hijo de 3 años debieron ser trasladados al Hospital Castro Rendón.
El siniestro vial tuvo lugar pasadas las 20.30 de este jueves sobre la calle René Favaloro, cuando un vehículo Volkswagen Suran impactó con un Toyota Rav4. En el primer vehículo, que se trasladaba en dirección norte, viajaba el hombre con su hijo. Ambos sufrieron heridas por lo que fueron trasladados al hospital. Los daños materiales en los vehículos fueron de consideración.
En tanto, en la Toyota circulaba en sentido contrario un hombre de 45 años quien, según información que trascendió, tenía 1.27 gramos de alcohol en sangre cuando se le realizó el test de alcoholemia.
Personal policial indicó que el conductor de la Toyota, que estaba alcoholizado, invadió el carril contrario y eso provocó el impactó contra el vehículo en el que se trasladaban el padre y su hijo.
Catorce años de una tragedia en la bajada al barrio
Hace catorce años, la bajada del barrio Rincón de Emilio fue escenario de un trágico accidente que tuvo como lamentable saldo la muerte de dos personas, entre ellos un niño.
El hecho ocurrió en la noche del 5 de septiembre de 2010, en la calle que deriva de la Avenida Argentina y baja al barrio. Al parecer, el conductor de un Volkswagen Fox negro perdió el control de su rodado cuando tomó la curva y desbarrancó, a 200 metros del acceso al barrio.
Producto del brutal impacto, Miguel Quinchavil de 50 años perdió la vida, mientras uno de los niños que lo acompañaban murió un día después.
Aparentemente Quinchavil se trasladaba a alta velocidad al barrio a dejar al amigo de su hijo, cuando perdió el control del vehículo, maniobró hacia ambos lados de la cinta asfáltica y finalmente terminó a 100 metros cuesta abajo dando varios tumbos, tras pasar por encima del guardarail. Por el violento accidente los menores salieron despedidos, mientras que el conductor quedó atrapado en el auto. Según describieron fuentes policiales, ninguno de los involucrados utilizaba el cinturón de seguridad.