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¿Quién es el prófugo que atraparon borracho en Puente 83?

Es un ladrón con antecedentes en Río Negro y Chubut. Manejaba una moto robada con 1.54 gramos de alcohol en sangre.
Lunes, 19 de agosto de 2024 a las 15:38

Los días de Cristian Ignacio Córdoba, en la clandestinidad llegaron a su fin de manera inesperada y accidental. Tras tres años prófugo, "Titi", como lo conocen en los bajos fondos, tiene condenas por asalto a mano armada. Fue capturado en un control rutinario en el Puente 83: manejaba borracho una moto robada.

Los agentes del Cuerpo de Seguridad Vial realizaban un operativo cuando detuvieron la marcha de un motociclista. Circulaba en una Corven 110, sin documentación alguna. Lo que en un principio parecía un caso menor, pronto reveló una historia mucho más compleja. El test de alcoholemia del motociclista arrojó una alarmante cifra de 1.54 gramos de alcohol por litro de sangre. Pero el verdadero giro inesperado vino cuando el hombre proporcionó una identidad falsa.

Los agentes, al investigar la documentación presentada, descubrieron que pertenecía a otra persona que estaba alojado en uno de los calabozos de la Comisaría 3° de Roca. Con el misterio en aumento, las pesquisas revelaron que el motociclista era, en realidad, el fugitivo Titi Córdoba, de 46 años. Tiene un historial delictivo que incluye robos en Cipolletti, Roca y Comodoro Rivadavia. Estaba prófugo desde 2021, cuando accedió al beneficio de salidas transitorias, pero nunca más regresó al Establecimiento de Ejecución Penal II.

Para empeorar las cosas, se descubrió que la moto que Córdoba manejaba también había sido robada, agregando un nuevo cargo a su ya extenso expediente. Durante el fin de semana permaneció en la Comisaría 4° de Cipolletti y esta mañana fue trasladado a la cárcel de Roca. 

 

Las motos no son lo suyo

Entre los viejos policías, recuerdan un asalto que cometió Titi Córdoba en 2017. Entró a una estación de servicios de Roca, y sacó de entre sus ropas un revólver calibre 38 y amenazó a los dos playeros. Se apoderó de las billeteras con la recaudación y un sobre donde escondían los billetes más grandes. Luego escapó a toda velocidad en moto.

Las cámaras de la estación de servicio Shell fueron fundamentales para poder culpar a Córdoba del asalto.

Pero en la huida se cruzó con un patrullero que comenzó a perseguirlo. En su afán por escapar, hizo una mala maniobra, perdió el equilibrio y terminó en el piso. Además de caer preso por el asalto a mano armada, también le llegó el pedido de captura de Comodoro Rivadavia, donde fue condenado a seis años de prisión por el robo a una agencia de turismo, donde se llevó 40 mil pesos, en julio de 2013.

 

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