El plazo de la prisión domiciliaria de W.G.H, el maestro de música condenado por abusar de niños y niñas en el Jardín de Infantes 31, ubicado en el barrio Melipal de Neuquén capital, fue prorrogado hasta el 6 de julio de 2026. La medida fue solicitada por el fiscal del caso, Manuel Islas, quien argumentó que la extensión era necesaria debido al riesgo de fuga del acusado.
La decisión fue tomada de acuerdo entre las partes involucradas, y el docente permanecerá detenido en su hogar hasta que la condena de 18 años, impuesta tras su juicio, quede firme.
El fiscal Islas expresó que la medida de prisión domiciliaria sigue siendo la más adecuada, señalando que "creemos que la única medida apropiada, idónea y necesaria para esa finalidad es la prórroga de la prisión domiciliaria". Además, destacó que tanto las querellas institucionales y particulares, como el abogado defensor del imputado, estuvieron de acuerdo con la prórroga solicitada.
El caso fue resuelto de manera excepcional, sin audiencia oral, debido a la falta de controversia entre las partes sobre el mantenimiento de la medida y la necesidad de evitar dilaciones innecesarias en el proceso judicial.
Detalles del caso y condena impuesta
El juicio de W.G.H culminó el 7 de noviembre de 2024, cuando un jurado popular lo declaró culpable de múltiples hechos de abuso sexual cometidos entre marzo y julio de 2022, mientras se desempeñaba como maestro de música en el Jardín de Infantes 31.
La fiscalía había presentado una acusación por 19 hechos de abuso, pero el jurado solo consideró nueve casos de abuso sexual simple, un hecho de abuso con acceso carnal y dos hechos de abuso sexual gravemente ultrajante. Todos los delitos fueron agravados por la calidad de educador del imputado.
El fiscal jefe Maximiliano Breide Obeid había solicitado una condena de 45 años de prisión para W.G.H, pero el juez de garantías Juan Manuel Kees impuso una pena de 18 años, la cual aún no ha quedado firme. Las partes involucradas impugnaron tanto la declaración de responsabilidad como la pena impuesta, y se espera que el Tribunal de Impugnación resuelva esta disputa en los próximos días.
Testimonios y pruebas en el juicio
El juicio, que demandó cuatro semanas de pruebas y testimonios, se basó en más de 100 testimonios, incluidos los de las víctimas a través de cámara Gesell, familiares, peritos y otros profesionales que participaron en la investigación. Durante el proceso, el Ministerio Público Fiscal presentó la teoría de que W.G.H aprovechó su rol como encargado de la educación de niños y niñas en el aula de música para cometer los abusos.
Prisión domiciliaria: contexto y justificación
El fiscal Islas destacó que la prisión domiciliaria es una medida adecuada en este caso, dado que aún no quedó firme la condena ni la declaración de responsabilidad. La medida se justifica, además, por el riesgo de fuga del imputado, quien podría eludir el proceso judicial si se encontrara en libertad.
El juez Marco Lupica Cristo, encargado de extender la prisión domiciliaria, sostuvo que, aunque lo habitual es resolver este tipo de solicitudes en audiencia oral, las circunstancias del caso justificaron una decisión por escrito. De acuerdo con el magistrado, la prórroga fue acordada sin generar controversia entre las partes y permitió una respuesta rápida y eficaz, respetando los principios de celeridad y economía procesal.
Con la prórroga de la prisión domiciliaria, W.G.H continuará cumpliendo su medida cautelar en su domicilio hasta la resolución final del caso, mientras que las víctimas y la sociedad en general esperan la definición de la condena.