La tragedia en la ruta Provincial 6 sigue sumando dolor. En las últimas horas se confirmó que murió la esposa del conductor del Volkswagen Suran que volcó este mediodía a unos 10 kilómetros al norte de Roca, en dirección a Casa de Piedra. La familia viajaba desde Lanús y el hombre que conducía reconoció ante los policías que venía muy rápido.
Todos los ocupantes del auto, menos una niña y el conductor, salieron despedidos del vehículo. La mujer fue trasladada de urgencia al hospital Francisco López Lima, pero falleció en el camino debido a las gravísimas lesiones que sufrió. En el lugar del accidente ya habían muerto sus padres, convirtiendo el viaje familiar en una verdadera pesadilla.
El siniestro ocurrió alrededor de las 12:15, cuando el conductor perdió el control del vehículo a la salida de una curva. En el auto viajaban cinco personas: el matrimonio, su hija de 12 años y los padres de la mujer. Todos eran oriundos de Lanús Oeste y los adultos fallecidos eran de nacionalidad peruana.
La mecánica del desastre: tumbos, velocidad y cinturones sin usar
Según los primeros datos de los peritos en el lugar del hecho, el vehículo mordió la banquina en una zona de curvas, el conductor intentó corregir la trayectoria, pero cruzó de carril y el auto comenzó a dar entre cinco y ocho tumbos, antes de quedar sobre uno de sus laterales en la banquina contraria.
De acuerdo a los primeros testimonios, el conductor admitió que venían a alta velocidad, lo que refuerza la hipótesis de que el exceso fue determinante. Por la forma en que quedó la Suran –deformada en la trompa y en la cola– se estima que los vuelcos fueron "de campana".
Los adultos no llevaban cinturón de seguridad y habrían sido despedidos del habitáculo por el portón trasero. La única que viajaba correctamente sujeta era la hija del matrimonio, de 12 años, quien iba en una silla infantil. Gracias a eso, se salvó milagrosamente.
Solo quedaron con vida el padre y su hija
La menor y su padre fueron trasladados al hospital de Roca, donde permanecen en observación, fuera de peligro. La situación emocional del hombre es crítica: sobrevivió al desastre en el que perdió a su esposa, su suegra y su suegro, mientras su hija presencia todo desde la inocencia de los 12 años.
En el lugar trabajaron policías, médicos y peritos del Gabinete de Criminalística. La investigación quedó a cargo del Ministerio Público, que deberá determinar con precisión si hubo imprudencia al volante o alguna falla mecánica.