El video que encendió la mecha
En las últimas horas, circula un video que sacudió al mundo político: José Luis Espert, presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, agradeciendo públicamente a Federico “Fred” Machado. El empresario está detenido desde 2021 y enfrenta cargos por narcotráfico, lavado de dinero y fraude electrónico en Argentina y Estados Unidos.
La grabación, difundida por medios nacionales, reavivó la polémica. Diputados de la oposición y ciudadanos en redes sociales reclamaron una investigación inmediata y la remoción de Espert. “No podemos permitir que un vínculo de este tipo manche la legitimidad del Congreso”, afirmó Germán Martínez, presidente del bloque de Unión por la Patria (UxP).
Las pruebas que cuestionan a Espert
Documentos judiciales de Estados Unidos publicados recientemente muestran un entramado inquietante. Entre las evidencias figura un giro de 200 mil dólares realizado en 2020 desde un fideicomiso compartido por Machado y otra empresaria, supuestamente destinado a la campaña presidencial de Espert en 2019.
Además, existen registros de vuelos y vehículos puestos a disposición del economista durante ese mismo período. La dimensión de estas acusaciones aviva un debate sobre la integridad de la política y la financiación de campañas electorales.
Machado está detenido en Argentina y en proceso de extradición a Estados Unidos, donde enfrenta cargos graves relacionados con tráfico de drogas y lavado de activos a gran escala.
Reclamo en el Congreso
El pedido de remoción de Espert no tardó en llegar. Germán Martínez sostuvo que “no se puede debatir un presupuesto con un diputado con vínculos narcos en la presidencia de la comisión clave del Congreso”. El argumento central de la oposición es que este vínculo compromete la legitimidad de las decisiones sobre el gasto público y las finanzas nacionales.
El escándalo golpea especialmente porque Espert ocupa un rol estratégico desde enero de este año, controlando el avance de uno de los debates más sensibles: el Presupuesto 2026.
La defensa de Espert
En su defensa, Espert sostuvo que las acusaciones forman parte de una “operación política” que viene desde 2021. Admitió haber conocido a Machado en 2019 y haber aceptado su colaboración para presentar su libro en Viedma, incluyendo vuelos en el avión del empresario.
“No tenía conocimiento de sus actividades ilícitas —dijo Espert—. Si lo hubiera sabido, no le agradecía a los cuatro vientos”. Sin embargo, la contundencia del video y los documentos generan dudas y alimentan la indignación pública.
El costo político y social
La crisis no es solo política: es una grieta que atraviesa la confianza de la ciudadanía en sus instituciones. La polémica vuelve a poner en debate el control de fondos públicos y la transparencia en la política.
En redes sociales, la indignación crece y los hashtags vinculados al caso circulan con fuerza. Los ciudadanos reclaman que se investigue a fondo y que Espert dé un paso al costado. El Congreso, mientras tanto, se encuentra en una encrucijada: mantener al frente de la comisión clave a un legislador cuestionado o responder al clamor público.
La pregunta final
La pregunta que resuena no es solo política, sino ética: ¿puede un diputado con vínculos confirmados con un empresario acusado de narcotráfico seguir manejando las cuentas públicas del país? El caso Espert abre una herida que, por ahora, sigue abierta.