Londres.- El británico Ronnie Biggs, que se hizo famoso como el "ladrón del siglo" por el millonario asalto a un tren posta que viajaba de Glasgow a Londres en 1963, murió hoy a los 84 años.
Biggs, que se hizo famoso por su espectacular huida a Brasil tras el robo, falleció en una residencia de ancianos en East Barnet, en el norte de Londres, donde recibía atención médica, tras haber sufrido varias apoplejías en los últimos años.
El ladrón, cuya salud se había deteriorado a raíz de varias apoplejías, había sido visto por última vez en público el pasado mes de mayo cuando asistió al funeral de su compañero de asalto Bruce Reynols, según pudo saber la agencia británica PA.
En la madrugada del 7 al 8 de agosto de 1963, el conductor de un tren postal, que efectuaba el recorrido entre la ciudad escocesa de Glasgow y la estación londinense de Euston, se detuvo en un punto aislado a la altura de Ledburn, al noroeste de Londres. Una señal roja en la vía le ordenó detenerse.
La luz roja era el primer paso del plan de asalto ideado por Biggs junto a un grupo de asaltantes, que luego golpearon al conductor, desengancharon la locomotora y los dos primeros vagones, y descargaron 120 sacos que contenían 2,5 toneladas de dinero en efectivo. Todo ello, sin que el personal que se encontraba en los otros vagones se diera cuenta del golpe.
La historia de Biggs y su "robo del siglo" -en el que él y varios cómplices se llevaron un botín de 2,6 millones de libras (tres millones de euros) del tren de Glasgow, la mayor suma robada hasta entonces en un sólo asalto- ha inspirado varias películas. La suma del botín equivale hoy a 52 millones de euros (69 millones de dólares).