José Luis Cabezas, reportero gráfico y fotógrafo argentino, era casado y con una hija. Su caso se convirtió en el mayor emblema de la lucha de la prensa argentina en pos de la libertad de expresión. La repercusión política fue enorme y derivó en cambios en el gabinete de gobierno nacional y en la pérdida de las elecciones del gobernador, por entonces candidato presidencial del oficialismo.
Fue después de que tomara, para la revista Noticias, las primeras fotos públicas del empresario Alfredo Yabrán, objeto de una investigación periodística sobre la presunta implicación en casos de corrupción.
El auto y la cobertura era compartida con el hoy presidente del Foro por el Periodismo Argentino (FOPEA), periodista Gabriel Michi.
El asesinato ocurrió durante la gobernación de Eduardo Duhalde en la Provincia de Buenos Aires, y fue visto como un posible "mensaje mafioso" de la policía de la provincia de Buenos Aires hacia su gestión; "me tiraron un cadáver"1 declaró.
Por su parte el presidente Carlos Saúl Menem prometió esclarecer el caso; sin embargo recibió fuertes críticas por la posible complicidad en los presuntos negociados investigados. El caso tuvo muchísima repercusión en la Argentina, donde Cabezas sigue siendo recordado.
El 2 de febrero de 2000, en juicio oral y público, fueron condenados a prisión perpetua los cuatro integrantes de la banda "Los Horneros": Horacio Braga, José Auge, Sergio González y Héctor Retana, así como a Gregorio Ríos, jefe de Seguridad de Yabrán, y los policías Sergio Camaratta, Aníbal Luna y Gustavo Prellezo.
Destino de los implicados
Gustavo Prellezo, policía, fue condenado a perpetua pero, el 23 de septiembre de 2010 por cuestiones de salud, fue beneficiado con prisión domiciliaria.Miguel Retana, condenado, enfermo de SIDA, murió en 2001.
Sergio Camaratta y Aníbal Luna, ambos policías de Pinamar, fueron condenados a prisión perpetua.
Gregorio Ríos, jefe de custodia de Alfredo Yabrán, fue condenado como instigador del crimen y se le rechazó la excarcelación en diciembre de 2006; su condena a perpetua cambió a 27 años, en su último período en prisión domiciliaria.
José Luis Auge, condenado, fue liberado en 2004.
Sergio Gustavo González, condenado a cadena perpetua, fue liberado hacia febrero de 2006 por reducción de pena a 20 años; tal reducción habrá de ser revocada por la Corte Suprema de Justicia de Argentina.
Horacio Anselmo Braga fue condenado a 18 años y liberado el 25 de enero de 2007; varios factores influyeron: se benefició con el 2 por 1 (se computa doble cada año de proceso sin condena), obtuvo resultados favorables en los informes psiquiátricos, presentó buena conducta, y pagó una fianza de 20.000 pesos para salir de la Penitenciaría número 9. Ese día, 6.000 personas se juntaban en Pinamar para pedir justicia por Cabezas.
Alberto Gómez, (a) "la Liebre", comisario de Pinamar, condenado por haber liberado la zona para que el crimen ocurriera.
Se revocó la libertad condicional de Auge, González y Braga por haber violado sus términos: no se encontraban en los domicilios informados.