El intendente de Neuquén, Horacio Quiroga, volvió a rendirle culto a la impronta del General Perón, y compró “la sidra y el pan dulce” para distribuir entre los empleados de la administración municipal.
Se trata de canastas navideñas con varios y variados productos, muy bien presentados, que demandaron una inversión total de 2.465.827 pesos, compuestos por los siguientes importes: 2.226.070 pesos en alimentos y bebidas, y 239.757 pesos en cajas de cartón.
Los 3.430 kits de productos navideños se los compraron a Yune SA e incluyen un pan dulce con frutas de 500 gramos, dos budines de 230 gramos cada uno, un paquete de maní confitado, un paquete de maní, dos paquetes de rocklets, dos paquetes de garrapiñadas, dos turrones marca Arcor o de calidad superior, un postre Bon o Bon mantecol, una botella de sidra (Real, Del Valle o de calidad superior), y una botella de espumante tipo Deseado o de calidad superior
. Mientras que las 3.430 cajas de cartón corrugado, con cartulina montada, impresión full color personalizada y diseño institucional, se las compraron a Loup SRL.
En ambos casos se trató de compras directas, para las cuales el Municipio invitó a 19 proveedores, 6 de los cuales acercaron propuestas y se eligió a las dos cuyos precios resultaron “más convenientes”.
Este año se repartieron 170 canastas navideñas menos que en diciembre de 2016, cuando fueron 3.600 y costaron 1.980.000 pesos en total.
Los productos fueron prácticamente los mismos, con la diferencia de que en aquella oportunidad se los compraron a La Masía SRL, también por contratación directa.