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Embargan al IPROSS por no asistir a una afiliada
La Justicia le había ordenado que le brindara un procesador de palabras. La obra social no lo hizo, y ahora la embargaron por más de 180 mil pesos.
El 12 de abril último, la Cámara Laboral Segunda de Bariloche le ordenó a la obra social de los estatales rionegrinos (IPROSS) que le proveyera un procesador de palabras modelo Sonnet a una afiliada. Y, como no cumplió, dispuso el embargo de la cuenta.
Según informaron fuentes judiciales, en las últimas horas, el Tribunal que integran los jueces Alejandra Paolino, Jorge Serra y Carlos Rinaldis, ordenó el embargo preventivo por una suma de 180.550 pesos, más intereses y costas.
La mujer había presentado el amparo detallando que en 2010 le colocaron un implante cloquear, con audífono interior en el oído izquierdo, que requiere un procesador de palabras exterior; y utiliza un audífono en el oído derecho.
En 2016 ese procesador de palabras acusó los desgastes propios del uso, y la empresa encargada del mantenimiento dijo que como resultaba imposible su reparación, debía ser reemplazado por otro del modelo Sonnet.
Sus pedidos no tuvieron resultado, por lo que fue a la Justicia y esta destacó que "no debe permitirse que el derecho a la salud sea una simple declaración transformándose en una ficción, sino que debe ser reconocido en la realidad”.
Entonces concluyó que "debe responderse adecuadamente a los requerimientos de los médicos tratantes, en la forma y tiempo que estos indican para un mejor tratamiento de la enfermedad, y calidad de vida”.
