Cirugías suspendidas, problemas para distribuir la ropa de cama y las dietas de los pacientes, son algunos de los inconvenientes que genera el mal funcionamiento de los ascensores del hospital Castro Rendón.
La situación se repite recurrentemente, y desde ATE denunciaron que todos los sectores profesionales y de funcionamiento firmaron una carta, indicando los riesgos que significa el traslado por las escaleras de los pacientes recién intervenidos , muchos de ellos trasplantados o cirugías de complejidad que se realizan en el nosocomio provincial.
Agregaron que es imposible entregar la comida o mantener la ropa de cama en condiciones, trabajando cinco pisos por escalera. Anticipan que algunos sectores pueden ir al paro, aunque aclaran que el hospital está funcionando a pesar de toda esta situación.
En el programa La Torre, de Mitre Patagonia, habló Juan Millapán, delegado de ATE en el hospital Castro Rendón: