Durante un encuentro que Rolando Figueroa encabezó en el Norte neuquino, quedó bien en claro que no tolerará viejos vicios, en su objetivo de que el Estado les brinde a los ciudadanos los servicios que necesitan y merecen. Aseguran quienes compartieron la reunión (con autoridades comunales en funciones y electas) que el gobernador electo se disgustó cuando supo que un funcionario con rango de jefe les dio la espalda a los intendentes, porque estaba “preparándose” para un viaje que realizaría al día siguiente.
En eso estaban, conversando sobre los trabajos para asegurar la apertura del Paso Pichachen (de El Cholar hacia Chile), cuando Figueroa pidió precisiones sobre el estado del camino. Fue ahí cuando uno de los jefes de Vialidad Provincial en esa región, Rigoberto Gutiérrez, informó que el jefe de Conservación -al que identificó como el ingeniero Julián- no había podido asistir por el motivo al que se hizo mención.
Tiempo tenía; pero en fin, sus prioridades fueron otras. Entonces, firme y sereno, Figueroa expresó que se vaya tranquilo, nomás; pero que sepa que desde el 10 de diciembre no se van a tolerar estas cosas. Los presentes se miraron entre sí, acompañaron con gestos de aprobación y hasta hubo quien dejó escapar una mueca risueña. Hicieron propio el mensaje: la prioridad absoluta será la solución de los problemas que aquejan a la sociedad y quienes no lo entiendan deberán dar un paso al costado. Está claro que el funcionario viajero es uno de los que perderán el cargo político.
Hoy, Vialidad es uno de los organismos más cuestionados del gobierno provincial y Figueroa no aceptó semejante excusa. De las reuniones que realizaron hace apenas unos pocos días en el Norte, participaron funcionarios y dirigentes de Chos Malal, El Cholar, Andacollo, Loncopué, El Huecú, Taquimilán, Tricao Malal y Los Guañacos.
Vialidad, organismo que conduce Mauro Millán, transita por un presente complejo y tiene abierto un frente de confortaciones con la Asociación de Bomberos Voluntarios de Villa Pehuenia - Moquehue, que en la semana presentó un proyecto para que la Legislatura declare el estado de emergencia vial, tanto en esas localidades como en Aluminé y alrededores.
El pedido lo argumentó en el “grave estado de deterioro y abandono de las rutas provinciales N 13, 23, 11 y 46”, lo que no sólo genera daños a los vehículos y demoras en la circulación, sino también riesgos de accidentes. Los bomberos no son los únicos que cuestionan el estado de esas y de otras rutas. También lo han hecho, por ejemplo, la intendenta de Rincón de los Sauces, Norma Sepúlveda (MPN) y los diputados Luis Aquín (Juntos por el Cambio) y Carina Riccomini (Juntos, aliada del MPN).