Entrar a un edificio y ver a un tótem de seguridad ya comenzó a ser una realidad en la capital neuquina. El ¿reemplazo? del tradicional portero había arribado hace unos años a la ciudad de Buenos Aires y ahora se expandió hacia la capital neuquina. El avance tecnológico amenaza con más de 700 puestos laborales de porteros que trabajan en los cientos de edificios.
"Si bien no son muchos los consorcios que han adoptado este modelo de vigilancia en Neuquén, hay que decir que es un auge innegable. La tecnología avanza a pasos agigantados y es una realidad que hay que aceptarla", contó David Zapata, referente de la Obra Social de porteros de edificio, durante una entrevista con AM550 y CN24/7.
Sin embargo, la discusión sobre este avance tecnológico puede reemplazar a un ser humano sigue siendo más que polémica. "Más allá de la instalación de un dispositivo de este tipo, nunca se va a poder reemplazar la función y la tarea que hace un encargado/a de un edificio. Los porteros no solo ven y observan los movimientos, sino que también reciben, por ejemplo, al aguatero o al cartero", afirmó Zapata.
Actualmente, en la capital neuquina hay 700 porteros de edificio. Estos "ojos de halcones" vigilan las 24 horas el ingreso y egreso de las personas, pero lógicamente hay funciones físicas que no puede realizar la persona que está detrás del centro de monitoreo. La tarea se simplifica a una sola: alertar y llamar a la policía en caso de una situación de inseguridad.
¿Abaratar costos es el factor clave?, desde la Obra Social de los porteros no están de acuerdo. "El mantenimiento de estos tótems cuesta 200 mil pesos mensuales y los resultados son relativos. Hace pocos días entraron a robar una bicicleta a un edificio y ninguna cámara vio nada", expresó David Zapata.
En las últimas semanas, este tema comenzó a llamar la atención de algunos consorcios. Hace pocos meses se estrenó la serie El Encargado, que protagoniza Guillermo Francella y que muestra cómo es reemplazado el portero por estos polémicos tótems de seguridad. En Buenos Aires uno de cada cinco edificios con residentes de alto poder adquisitivo ya los tiene instalado.