El horror se repite en Choele Choel. Más de 30 perros fueron envenenados en distintos puntos de la ciudad, desatando una ola de dolor e indignación entre los vecinos. No es la primera vez que ocurre: episodios similares se registraron en 2017 y 2020, dejando una huella de impotencia y desesperación en la comunidad.
Las redes sociales se convirtieron en el reflejo del reclamo popular, con mensajes de tristeza y exigencias de justicia. Ante la gravedad de los hechos, el Municipio de Choele Choel informó que el área de Zoonosis presentó una denuncia para dar con los responsables de este grave atentado contra la salud pública. Además, instó a los vecinos afectados a realizar sus propias denuncias y a aportar pruebas que ayuden a esclarecer el caso.
Vecinos movilizados y nuevas herramientas para la investigación
La comunidad no se quedó de brazos cruzados. Vecinos autoconvocados preparan una nota formal para entregar al Municipio, exigiendo respuestas y medidas concretas. A diferencia de años anteriores, hoy se cuenta con sistemas de cámaras que podrían aportar información clave para identificar a los responsables.
Mientras tanto, veterinarias locales como Biondini y El Sauce han estado atendiendo a los animales afectados, intentando salvar a aquellos que aún presentan signos de intoxicación. En la intersección de Chile y Alsina, policías y veterinarios trabajaron intensamente tras el llamado de vecinos que alertaron sobre siete perros envenenados.
Un patrón que se repite y exige justicia
El envenenamiento de perros en Choele Choel no es un hecho aislado. En agosto de 2017, en menos de 24 horas, se encontraron 13 perros muertos, uno de ellos en la puerta de la Escuela 10. En 2020, la historia se repitió, dejando en evidencia una cruel práctica que sigue vigente.
La comunidad exige respuestas. El Municipio ha dado el primer paso con la denuncia, pero los vecinos esperan que esta vez la investigación avance y que los responsables sean identificados y castigados. Mientras tanto, el miedo y la indignación persisten en las calles de Choele Choel, donde cada dueño de mascota teme que su compañero sea la próxima víctima.