Adiós a la calle inundada: la obra que promete cambiar la postal
Los vecinos y automovilistas que pasan por la esquina de Brown y Matheu, en pleno centro de Neuquén, conocen de memoria la “lagunita” que se forma cada vez que brota agua de abajo y se acumula en la calzada. Ahora, la Municipalidad asegura que la postal de charcos eternos y veredas resbalosas tiene los días contados.
En diálogo con Mejor Informado, Alejandro Nicola, el secretario de Infraestructura y Planeamiento Urbano, explicó que ya pusieron en marcha una obra clave: un drenaje subterráneo que va a captar el agua de ese sector para conducirla por República de Italia e Yrigoyen, hasta conectarla con otro pluvial.
Qué se está haciendo y cuánto tiempo llevará
El plan incluye abrir la calle, colocar una cañería especial y demoler un viejo paredón de ladrillo que será reemplazado por uno de hormigón. “Es una obra que cuando se termine no se va a ver mucho, porque todo va enterrado, pero es clave para que no haya más agua acumulada”, detalló el funcionario.
De paso, mientras excavan van a detectar de dónde sale exactamente esa agua: si es de riego, si hay caños rotos o alguna infraestructura dañada. Si se confirma algún desperfecto en la red, intervendrá el EPAS. “Nuestra tarea es reparar lo pluvial, pero si encontramos otra cosa se hará en paralelo”, explicó.
Cortes, ruidos y paciencia vecinal
Como toda obra en vía pública, el drenaje traerá ruido, polvo y cortes de tránsito. El secretario adelantó que los trabajos se extenderán por seis meses y que se irá habilitando la calle por tramos, a medida que avance la obra.
Mientras tanto, los vecinos sueñan con dejar de esquivar charcos eternos y manejar por calles que no parezcan un río cada vez que brota agua desde abajo.