El complejo volcánico Laguna del Maule, ubicado en el límite entre Neuquén y Mendoza, encendió las alarmas tras registrar más de 11.000 eventos sísmicos en julio, un aumento inusual que llevó a las autoridades a elevar la alerta técnica a color amarillo.
La situación despertó preocupación en toda la región, ya que un crecimiento tan marcado de la actividad interna suele anticipar cambios que podrían impactar en la seguridad de las poblaciones cercanas, como Cochico y Barrancas en Neuquén, y Las Loicas, Bardas Blancas y Malargüe en Mendoza, todas dentro de un radio de unos 100 kilómetros del volcán.
Según el Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar), los movimientos detectados son volcano-tectónicos, relacionados con fracturas internas de roca que evidencian una progresión de la actividad sísmica hacia nuevos sectores del complejo. Además, se registraron incrementos en las tasas de deformación del terreno, otro indicio que sugiere que el volcán se encuentra por encima de sus niveles normales de actividad.
Desde el organismo remarcaron que, por el momento, no hay indicios de un proceso eruptivo inminente, pero admitieron que la actividad actual es motivo de un monitoreo constante y detallado. La alerta amarilla implica un estado de vigilancia reforzada para detectar cualquier cambio que pudiera poner en riesgo a las poblaciones o la infraestructura de la zona.
Este complejo se encuentra en una región que ya vivió momentos críticos por eventos volcánicos en la cordillera, lo que alimenta el temor de vecinos y autoridades. La posibilidad de nuevas restricciones, evacuaciones o impactos sobre rutas y servicios esenciales preocupa especialmente en localidades cercanas al paso internacional Pehuenche, clave para la conexión con Chile.
En este contexto, el llamado de las autoridades es a mantenerse atentos a los reportes oficiales y evitar la circulación de información falsa que pueda generar mayor alarma. El monitoreo se realiza en coordinación con organismos nacionales y provinciales para informar de inmediato cualquier evolución en la situación.