Atrás de la nada, hay Patagonia

Por Carla Barbuto

Hace algún tiempo, la dramaturga chubutense Ana Laura Suárez Cassino nos dijo: “En la Patagonia, el tiempo es distinto, el cielo es distinto, el aire es distinto…  Hay otro universo sensorial; grandes extensiones donde parece no haber nada y, detrás de esa nada, hay gente, hay cosas, hay vidas”. Esa frase, que recordamos como una suerte de mantra cada vez que surcamos la estepa, hoy se nos refresca al escuchar a Mariela Garolini.
Mariela es una de las impulsoras de “Teatro en el medio de la nada”, un impresionante ciclo teatral que moviliza almas inquietas desde Astra.

((Astra es una localidad cercana a Comodoro Rivadavia que tiene tanta historia, legado y presente que sería imposible abarcar esta inmensidad en una crónica))

¿Cómo contás el festival a quien no conoce Astra?
La idea del festival surgió hace bastante y ahora estamos en la segunda edición. Veníamos pensando en esto porque tenemos una sala, el cine-teatro de Astra, y lo usamos como escenario de espectáculos de música, danza, conferencias... La sala, como es un verdadero teatro y nosotras (alude a la Comisión Directiva de la Biblioteca Popular Astra, que trabaja desde el año 2007, y está formada por Cristina Nieva, Cristina Farias, Marta Hary, Alex Ventimiglia y la propia Mariela) somos una organización sin fines de lucro, está abierta para quienes lo deseen. Nos parecía que el teatro era una parte importante que debíamos fortalecer, sobre todo, el teatro independiente.

A Comodoro llega el teatro comercial, que está muy bien, pero nos parecía que era importante darle relevancia al teatro regional e independiente. Nosotras no sabemos casi nada de teatro así que charlamos con gente que está en el tema, pedimos asesoramiento a Helvert Collantes,director de Mablán Espectáculos, y actualmente es él quien hace la curaduría del festival.
El festival se hace en el segundo semestre del año con una función mensual. Helbert hace la convocatoria y los elencos se seleccionan en relación a algún reconocimiento que hayan tenido a nivel provincial o regional. El domingo 15 de septiembre tenemos una función de "Elisa", del Grupo “Lo eventual”, que viene de Ushuaia (Tierra del Fuego).

El Cine teatro Astra fue declarado patrimonio cultural de la ciudad, según Ordenanza Municipal 11.501/14. Este lugar, antiguamente era un pueblo petrolero de la empresa Astra, poblado originalmente por  europeos en su mayoría alemanes y austríacos.
El edificio del cine teatro fue construido en 1923  con ladrillos silicio calcáreos fabricados en el lugar con ostras marinas fosilizadas. Es de estilo austriaco de formato cuadrado. Desde su inauguración hasta la década del 60 cumplió una función social muy importante, se ofrecía espectáculos de cine y teatro hasta 2 o más veces a la semana.
Luego fue cerrado por casi 40 años debido a que la empresa se lo vendió a la Sociedad Cooperativa de Comodoro Rivadavia, quienes, solo en casos muy especiales abrían sus puertas.
La Asociación Civil sin fines de lucro denominada Biblioteca Popular Astra logró rescatar el cine teatro de Astra firmando un contrato de comodato en octubre de 2014, y abrir nuevamente sus puertas como centro cultural.
Desde el año 2016, se encuentra en una lista de Bienes de Patrimonio Histórico y Cultural de Comodoro Rivadavia, según ordenanza municipal 12.087/16.

Han tenido muy buena recepción, ¿no?
Si, los espectadores fueron sumándose. El año pasado terminamos con funciones ante 50 personas y eso es muy bueno porque estamos hablando de teatro independiente. El año pasado nuestro balance fue muy bueno.

Estamos hablando de teatro independiente y… ¡en Astra!
Claro, nosotros utilizamos la expresión “teatro en medio de la nada” no como un artilugio de difusión. “Teatro en medio de la nada” te lo dice  todo. Estamos en una señora sala de teatro, con capacidad para 200 personas, es una sala de 1923 que es patrimonio histórico de la ciudad, una sala que la rescató y restauró la biblioteca… ¡No es poca cosa que una biblioteca lo haya logrado! Y encima estamos en el medio de la pampa, rodeados de campo a 20 kms. de la ciudad de Comodoro. Estar en el medio de la nada es un atractivo también, estamos lejos con una gran sala hermosa y hacemos teatro.
Nos parece importante trabajar con el teatro. Queremos motivar al público a que vea teatro, tener una agenda periódica. Nuestra sala nos permite eso. 
 

El teatro no es sólo para el elenco, que tiene posibilidad de mostrar su trabajo, sino también para todos, que nos formamos como espectadores. Creemos que estamos fortaleciendo la identidad regional y eso también es un objetivo. 
Personalmente creo que el teatro es mágico. Nos van a narrar o interpretar una historia, a la que no le podemos poner pausa, ni retroceder bajo ninguna circunstancia. Tenemos que tener nuestra atención puesta ahí, a unos metros. En el escenario hay gente como vos, como el espectador, que respira, que le ves la transpiración y que está jugando y haciendo un gran esfuerzo de ser otra persona, otra persona a la que le pasan cosas.
Cada presentación de una obra es única e irrepetible, por más que la función sea la número 20. El público es diferente, los actores tienen días diferentes… Terminada la obra, el público se va, comenta, se sorprende, o no le gusto, lo que sea... pero le generó algo, y todo fue en vivo. Para mi el teatro es mágico

Atrás de la nada, hay cosas, hay vida, hay gente y hay teatro. Pero, sobre todo, hay patagónicos que son capaces de mover voluntades tras un proyecto cultural único, imposible de abarcar por completo en esta humilde crónica.