La Liga Profesional de Fútbol sorprendió con un cambio de horario que desafía la lógica del calendario. El encuentro entre Vélez y Rosario Central, previsto originalmente para el sábado 11 de octubre a las 21:15, se pasó para las 22:15, convirtiéndose en un partido que, casi con seguridad, terminará pasada la medianoche del domingo.
El motivo oficial es “por cuestiones organizativas”, aunque la medida vuelve a poner en evidencia los problemas de planificación de los encuentros en el fútbol argentino. Este duelo será el último del sábado, que incluirá además Barracas Central-Boca (14:30), Gimnasia-Talleres (16:45), Banfield-Racing (19:00) y Belgrano-Estudiantes (21:15).
En lo deportivo, Rosario Central llega motivado tras vencer a River en el Gigante de Arroyito por 2-1, consolidándose como líder de la tabla anual con 53 puntos y acercándose a la clasificación a la próxima Copa Libertadores. Vélez, por su parte, intentará retomar la senda del triunfo luego del empate 2-2 con Deportivo Riestra, y se mantiene segundo en el grupo B con 22 unidades.
Con este horario, la Liga Profesional propone un cierre de jornada poco convencional que obliga a los hinchas a extender la noche para seguir el encuentro. Más allá de la estrategia o el resultado, la verdadera incógnita será si alguien conseguirá dormir antes de que el silbato final marque el inicio del domingo.