La muerte de Diogo Jota fue un impacto en el mundo del fútbol. El delantero del Liverpool y de la selección portuguesa que perdió la vida en un accidente automovilístico junto a su hermano André Silva, también futbolista. Muchos de sus compañeros en el club inglés y en el seleccionado luso, incluido Cristian Ronaldo, además de la Federación Portuguesa de Fútbol, sus clubes y ex clubes, expresaron su dolor por la pérdida en redes sociales.
El siniestro ocurrió en la madrugada del miércoles, cuando el Lamborghini en el que viajaban se salió de la autopista Rías Bajas (A52), en España, y se prendió fuego tras el estallido de un neumático. Ambos fallecieron en el acto. Tenía 28 años y acababa de casarse. Apenas once días atrás, Jota había celebrado su boda rodeado de afectos. Hoy, el dolor atraviesa a su familia, a su esposa y a toda una comunidad futbolera que lo admiraba por su entrega, talento y humildad.
El comunicado del Liverpool fue escueto pero conmovedor: “El club está destrozado por el trágico fallecimiento de Diogo Jota. No haremos más comentarios por el momento y pedimos respeto por la privacidad de su familia. Les daremos todo nuestro apoyo en esta pérdida inimaginable”.
Cristiano Ronaldo, su compañero en la Selección, expresó su pesar con palabras llenas de incredulidad: “No tiene sentido. Justo ahora que estábamos juntos en la selección, justo ahora que te habías casado. A tu familia, a tu esposa y a tus hijos les envío mis condolencias y toda la fuerza del mundo. Descansen en paz, Diogo y André”.
En Portugal, el Porto, club donde jugó a préstamo durante dos temporadas también manifestó su "conmoción y profundo pesar" por la tragedia. Lo mismo ocurrió en Inglaterra, donde decenas de hinchas se acercaron al estadio de Anfield para dejar flores, velas y bufandas rojas en señal de homenaje.
Diogo José Teixeira da Silva, más conocido como Diogo Jota, comenzó su carrera en el Paços de Ferreira, fue fichado por el Atlético de Madrid en 2016 y luego cedido al Porto. Su consagración llegó en la Premier League, primero en Wolverhampton y desde 2020 en Liverpool, donde dejó una marca indeleble con goles clave y una conexión profunda con los hinchas.
Su hermano, André Felipe Silva, tenía 25 años y jugaba en el Penafiel, equipo de la segunda división portuguesa. Ambos compartían no solo la pasión por el fútbol, sino también una relación de hermandad muy cercana, ahora eternizada en esta tragedia que los unió en su último viaje.
La Guardia Civil y los servicios de emergencia confirmaron que no hubo sobrevivientes. Todo ocurrió alrededor de las 00:40 (hora local), cuando el vehículo de alta gama se salió de la autopista, impactó contra una valla y se incendió.
Diogo Jota ya no está, pero su huella queda. En la memoria del fútbol, en el corazón de sus hinchas y en el amor eterno de su familia.