Edin Dzeko, de 39 años, afronta un nuevo desafío en la Serie A tras firmar con la Fiorentina. Después de dos temporadas en el Inter y una etapa goleadora en el Fenerbahçe de Turquía, donde marcó 21 goles en la última temporada, el atacante bosnio buscará clasificar al equipo de Stefano Pioli a la próxima Champions League.
La Fiore podría beneficiarse de la posible apertura de una quinta plaza para competiciones europeas, objetivo que el bosnio considera “una lucha bonita”.
El secreto de Edin Dzeko: esfuerzo y detalles
En declaraciones a La Gazzetta dello Sport, el exjugador de Roma y Manchester City reveló cómo se mantiene competitivo:
“Tengo 39 años, mi carnet no miente. Para mantener el nivel debo esforzarme más que los demás”, explicó.
El delantero detalló que sigue programas de prevención, realiza ejercicios antes y después de los entrenamientos, cuida su alimentación y prioriza el descanso, aunque reconoció que no es sencillo con cuatro hijos en casa.
“Debo agradecer a mi esposa: cuando se acercan los partidos, ella cuida a los niños y yo duermo solo”, agregó.
Una filosofía de juego que va más allá del gol
Aunque se destaca como goleador, Dzeko aclaró que disfruta participar en el juego más allá de anotar:
“No soporto la idea de quedarme en el área esperando una oportunidad. Me gusta asistir y estar involucrado en el partido”.
Además, agradeció a Italia por su aprendizaje táctico:
“Llegué aquí con 29 años y aprendí casi todo lo que sé de fútbol gracias a este país”.
Infancia marcada por la guerra y cultura del sacrificio
Dzeko también recordó sus orígenes en Bosnia, donde creció durante la guerra:
“Ese contexto te moldea. Aprendes a no dar nada por sentado. Todo lo que hago está dedicado a mis padres; para mí es fundamental que estén orgullosos de mí”.
El jugador contó que usó su primer sueldo como futbolista para invitar a sus padres y su hermana a comer, un gesto que simboliza la importancia de su familia en su carrera.