La Política en Neuquén
Deshojando la margarita entre versiones y operetas
La catarata de versiones respecto a famosos e ignotos personajes que ocuparían cargos de relevancia rescata aquel viejo dicho que indica, “el que suena, suena”.A 23 días de la renovación de autoridades nacionales, provinciales y municipales, en la mayoría de los casos de la futura composición de gabinetes, reina el secreto absoluto. Sólo conjeturas y especulaciones ligadas a nombres de personas que podrían llegar a ocupar cargos importantes en el ámbito nacional. En nuestra provincia, por tratarse de un gobernador que se sucede a sí mismo, la situación no es tan desesperante. Mucho menos si se tiene en cuenta que se está ante una administración que en cuatro años puso el déficit en caja.
Si tomamos como ejemplo el caso de la sucesión en la municipalidad de Neuquén se puede concluir que la transición transcurre bajo un llamativo manto de armonía. La cosa parece ser llegar al 10 de diciembre. Después se verá.
Neuquén es el caso testigo que tienen en sus escritorios los funcionarios salientes de la administración Macri y los “posibles” entrantes de la futura gestión del “peronista” Alberto Fernandez. Vaca Muerta es la palabra mágica que abre puertas en el contexto internacional y el modelo político de “continuidad” provincial genera tranquilidad y confianza entre los inversores. El “Faro energético” funcionando en toda su dimensión. De no haberse mancado el actual gobierno nacional de Mauricio Macri, Vaca Muerta cerraría este año con record en inversiones, generación de empleo genuino y el fortalecimiento de muchos rubros de la industria nacional. La toma de decisiones erradas, más cercanas a la búsqueda de réditos políticos y no a políticas de estado, sumieron una vez más al país en un nuevo clima de desconcierto. Para ser más claros. Hace no más de 24 meses Macri y compañía tomaban las riendas de Vaca Muerta para desarrollarla y convertirla en la posibilidad de recuperación de la economía nacional. Para ello se hicieron de la estrategia y la matriz de desarrollo que la provincia de Neuquén había iniciado más de 10 años atrás. Se apropiaron del modelo neuquino y salieron a buscar inversores en el contexto internacional prometiendo ventajas comparativas y garantizando la seguridad de cada dólar invertido en nuestro país, vale decir Neuquén. Todo lo dicho y afirmado en esos dos años no tienen relación con el actual estado de situación en que se encuentra la industria petrolera. Una vez más el “verso” pudo más que el compromiso de las palabras y las acciones. Macri deja a la Argentina con un alto nivel de descreimiento entre los inversores extranjeros que operan en Vaca Muerta.
Confianza política
Las acciones permanentes en materia de política energética y el ida y vuelta, casi a diario, que los gobiernos de la provincia de Neuquén mantienen y mantuvieron con los distintos operadores de Vaca Muerta; no hacen más que explicar por qué Neuquén es la pata que garantiza seguridad jurídica y política, al menos, en el desarrollo de la cuenca neuquina.
Por eso no es casual que suene el nombre de Jorge Sapag como uno de los posibles presidentes de YPF. El “señor Shale”, así han comenzado a mencionarlo en los ámbitos “peronistas” y entre empresarios fuertes del sector, cuenta con antecedentes suficientes para ocupar el cargo principal de la petrolera argentina. Si bien él, en estos últimos días, ha dicho que no tuvo ofrecimientos, al respecto. Sus antecedentes lo ubican como posible titular de YPF. De no ser así será él en persona quien deberá explicar cuáles fueron los motivos para rechazar, por segunda vez, un ofrecimiento para un cargo de importancia en el contexto nacional.
El Faro Neuquino
Sapag es una de las patas que Neuquén tiene muy firme en el contexto nacional. La otra es el actual mandatario, Omar Gutiérrez, que el 10 de diciembre próximo iniciará su segundo y último mandato como gobernador. Gutiérrez cuenta con mucho predicamento en el escenario nacional sobre todo en el ámbito de los partidos políticos provinciales y los gobernadores “no peronistas”. Cordoba, Mendoza, Río Negro y Neuquén son las provincias que funcionaran como activos defensores del federalismo en el contexto nacional.
Así las cosas Gutiérrez mantiene su perfil de gobernante activo ocupando su tiempo con recorridas por distintas localidades y parajes de la provincia. Lo mismo hace su hermano, Pablo Gutiérrez Colantuono, el nacional y popular de la familia.Si bien no han surgido nombres de la futura composición del gabinete provincial podemos decir que habrá cambios de nombres pero no de políticas públicas. “El ritmo de la gestión de Omar se va a mantener. Creer que va a haber un cambio en la concepción ideológica de algunas áreas del gobierno porque hay un cambio de rumbo en el contexto nacional, es infantil y no conocer el grado de compromiso que nuestro gobernador tiene con la sociedad neuquina”, indicó uno de los hombres más ligados al mandatario.
“Así como nuestro gabinete, durante la gestión Cambiemos no fue “macrisado” obviamente es de esperar que durante la gestión de Alberto Fernandez no va a ser “peronizado”. Somos la neuquinidad misma de nuestra sociedad, asique no esperen cambios rutilantes”, señaló nuestro interlocutor.
Políticas públicas
Se sabe que habría cambios en áreas como Hacienda, Educación, Desarrollo Social, Trabajo, Seguridad y Gobierno. Las modificaciones en algunos casos están relacionadas a reemplazos por renuncias y en otros tienen que ver con la necesidad de dotar de mayor dinamismo en la toma de decisiones diarias en organismos ligados a Seguridad, Salud y Educación. En este punto hay una corriente de jóvenes profesionales que se vienen capacitando desde hace dos años. Son los soldados con los cuales la próxima administración de Gutiérrez piensa librarle la batalla final a la burocracia estatal. En este punto preparémonos para un primer año cargado de discusiones con las conducciones sindicales.
El regreso de “el Ganso”
En el ámbito de la ciudad de Neuquén, el intendente electo Mariano Gaido regresará de sus vacaciones a mitad de esta semana. Se espera que presente a su gabinete durante finales de esta semana y mitad de la próxima. Los nombres ya fueron más que promocionados asique obviaremos tales menciones, solo rescatar en su regreso a la función pública al ex ministro de Economía de la provincia, el contador Claudio Silvestrini. Gaido confió en este hombre la responsabilidad de administrar el presupuesto de 12.800 millones de pesos previstos para el próximo año.
No es momento de hablar de travesuras, desconfianzas y traiciones. El MPN y el resto de la política neuquina también tienen de estos condimentos. Lo dejaremos para otro momento del próximo verano que por lo visto amenaza con ser uno de los más “calientes” que podamos imaginar.