El actor estadounidense Johnny Depp deslumbró en Buenos Aires con una velada que combinó lujo, buena gastronomía y música improvisada, según informaron fuentes de primera mano.
Llegó a Argentina el lunes pasado y cumplió con una agenda intensa: presentación de su película como director, y reconocimiento oficial en la ciudad de La Plata. Pero la noche del jueves decidió “desconectarse” del papel tradicional de estrella de cine para entregarse a la experiencia porteña.
La cena tuvo lugar en el restaurante del Hotel Faena, donde el chef ejecutivo Emiliano Yulita preparó un asado a la leña con cortes seleccionados: cinco costillas, vacío, ojo de bife. Depp mostró particular interés por la técnica local de cocción, los tiempos y detalles del proceso.
Como maridaje, el sommelier del lugar, Maximiliano Pérez, le ofreció vinos tintos de la región de Mendoza —en su mayoría Malbecs del Valle de Uco— destacando una cosecha del tipo “Estiba Reservada 2016” que el actor eligió como su favorita de la noche.
Pero lo que verdaderamente marcó la velada fue el giro musical: una vez concluida la cena, Depp y su amigo Jorge “Corcho” Rodríguez se sumaron al escenario del living del hotel, donde ya tocaba la banda local de la casa. Bajo la luz tenue y ante un público íntimo —invitados de la alta sociedad porteña y figuras del espectáculo— el actor tomó la guitarra y participó de una zapada espontánea.
Los testigos cuentan que la mezcla fue inesperada: “ver a Johnny Depp así, relajado, sin sombrero de ala, con una guitarra en mano y disfrutando de la noche porteña” fue lo que sorprendió.
Además, Depp elogió la cultura argentina: se mostró fascinado por la calidad de la carne, el ritual del asado, la pasión por el vino y la forma en la que los porteños celebran la noche. Ese entusiasmo se reflejó en su disposición: saludó al personal del hotel, conversó con chefs y sommeliers, posó para fotos y luego se entregó a la actuación.
La velada refuerza la idea de un actor que, además de figurar en pantallas, sabe disfrutar momentos fuera del foco tradicional. Un capítulo más en su paso por la Argentina que, sin duda, quedará en el recuerdo de los pocos invitados que accedieron a esa noche exclusiva.
Natalia Graciano, María Campos, y Concepción Cochrane Blaquier en el faena