La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó este sobre un “enorme riesgo biológico” en Sudán. Esto sucede después de que combatientes se apoderaran del Laboratorio Nacional de Salud Pública en la capital Jartum. Mientras tanto, países extranjeros siguen evacuando a sus ciudadanos, a la vez que continúan rompiéndose los altos al fuego.
CNN reportó haber escuchado disparos y aviones de combate en la capital, y en el norte del estado de Jartum se produjeron fuertes enfrentamientos entre el ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido. Éste último es el grupo paramilitar que lucha contra las fuerzas armadas por el control del país. Ambas facciones son lideradas por generales enfrentados entre sí.
El número de víctimas mortales en Sudán desde que estalló la violencia hace 11 días asciende al menos a 459 muertos, con al menos 4.072 heridos, según informó la OMS. A esto se suma que el laboratorio tomado contenía muestras de enfermedades y otro material biológico, lo que lo convierte en una “bomba bacteriológica” en potencia, según dijeron fuentes médicas a CNN.
“El peligro reside en el estallido de cualquier enfrentamiento armado en el laboratorio, porque eso convertiría al laboratorio en una bomba de gérmenes” aseguraron los entrevistados. Y pidieron “una intervención internacional urgente y rápida para restablecer la electricidad y proteger el laboratorio de cualquier enfrentamiento armado”.
Mientras tanto, países como el Reino Unido, Francia, Corea del Sur y Pakistán siguen implementando planes de evacuación. La Casa Blanca, por su parte, intenta mediar, sin éxito, en un alto al fuego sostenible. Y dice estar estudiando un plan para enviar tropas estadounidenses a Puerto Sudán para seguir ayudando en la evacuación de sus ciudadanos.