Los portavoces de Burkina Faso y Malí avisaron a la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) que una posible intervención contra Níger sería considerada como una declaración de guerra contra ellos. "Advertir de que cualquier intervención militar contra Níger equivaldría a una declaración de guerra contra Burkina Faso y Malí", afirmaron.
El mensaje de estos dos países no solo es para sus colegas del continente. Lo es también para Europa, y en particular para Francia, que siguen muy de cerca lo sucedido y han condenado el golpe de estado contra el presidente Bouzam.
Según ambos países, una intervención podría desestabilizar a toda la región, generando consecuencias catastróficas. En ese sentido, expresaron su "fraternal solidaridad" al pueblo nigerino, que ha "tomado en sus propias manos su destino y asumido la plenitud de su soberanía ante la historia". "En todo caso, los Gobiernos de transición de Burkina Faso y Malí invitan a las fuerzas a estar listas y movilizadas, para echar una mano al pueblo de Níger”, completaron.
En el comunicado con el que expresaron el apoyo al golpe, también apuntaron contra la OTAN. Según ellos, la intervención de la alianza de defensa occidental generó un caos absoluto tras su intervención en Libia. También la acusan de haber impulsado una mayor actividad del terrorismo de Al Qaeda, Estado Islámico y otras agrupaciones en buena parte del continente.