El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, anunció que el Gobierno de Estados Unidos está “pausando ciertos programas de asistencia exterior” que benefician a Níger y que continuará “revisando” su asistencia al país africano “a medida que evolucione la situación”.
Blinken aclaró que se trata de una medida provisional y que esta no afecta a todos los programas de asistencia exterior de Estados Unidos en Níger.
Asimismo, el titular de Estado ha garantizado la continuidad de la asistencia humanitaria y alimentaria para “salvar vidas”, así como de sus operaciones diplomáticas y de seguridad “donde sea factible” para la protección del personal estadounidense.
“La provisión de asistencia de los Estados Unidos al Gobierno de Níger depende de la gobernabilidad democrática y el respeto por el orden constitucional”, recalcó en un comunicado, en el que se destaca que esta postura es “coherente con las medidas adoptadas por la Cedeao y la Unión Africana”.
El secretario estadounidense concluyó el escrito con un llamado a “la restauración inmediata del Gobierno elegido democráticamente” y reiteró su compromiso para ayudar al pueblo de Níger “a preservar su democracia ganada con tanto esfuerzo”.
Estas declaraciones llegan después de que el presidente depuesto de Níger, Mohamed Bazoum, pidiera este viernes ayuda a Estados Unidos y a la comunidad internacional para “restaurar el orden constitucional” en el país africano, tras el golpe de Estado que la Guardia Presidencial protagonizó la semana pasada alegando problemas de seguridad en el país y formara una junta militar.