Al menos 165 migrantes seguían desaparecidos tras el naufragio el pasado lunes de su embarcación en las costas de la capital mauritana, Nuakchot. Al momento, murieron al menos 25 de los pasajeros. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) indicó que unos 300 migrantes viajaban en la nave siniestrada, que pretendía llegar a las Islas Canarias, y que 120 supervivientes fueron rescatados por las autoridades mauritanas. Los demás siguen desaparecidos.
La embarcación, que había partido de las costas de Gambia, pasó siete días en el mar antes de producirse el naufragio, según la OIM.
El reporte resaltó que este "evento trágico" ocurre en el contexto del aumento de los flujos migratorios por la ruta del Atlántico occidental, donde numerosos migrantes intentan viajes peligrosos en busca de mejores oportunidades o para escapar de situaciones difíciles en sus países de origen.
El proyecto 'Missing Migrants' de la OIM ha registrado más de 4.500 muertes y desapariciones en esta ruta desde 2014, incluyendo más de 1.950 muertes el año pasado, el segundo año más mortífero jamás registrado.