Al menos 25 personas fueron detenidas en Israel, durante las protestas para pedir un acuerdo de alto al fuego y la liberación de rehenes en la Franja de Gaza.. En el mensaje, las autoridades destacaron que la mayoría de las manifestaciones se están llevando a cabo sin incidentes, y los arrestos se realizaron solo en situaciones de "disturbios públicos".
"La libertad de protesta y expresión no incluye la libertad de provocar incendios, obstruir el movimiento de los ciudadanos ni interrumpir el orden público", aseguró la Policía israelí. Durante la mañana, grupos de manifestantes cortaron algunas de las principales rutas del país utilizando neumáticos en llamas, aunque, en su mensaje, las autoridades dijeron que todas las carreteras en el país están ya abiertas.
Las protestas marcaron el inicio de un día de huelga nacional convocado por el principal grupo de familiares de rehenes, el Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos, para pedir un acuerdo de alto al fuego que termine con la ofensiva militar de Israel en Gaza y libere de una vez a todos los rehenes. La convocatoria ha sido secundada por algunos sindicatos y por varios cientos de negocios.
Las protestas tuvieron lugar en distintas ciudades de Israel, con Tel Aviv como el lugar con mayor afluencia. Allí, una inmensa bandera israelí con los retratos de los secuestrados fue desplegada en la denominada "plaza de los rehenes", convertida en lugar de congregación desde el inicio de la ofensiva israelí, que estalló después de que el 7 de octubre de 2023 el grupo Hamás, considerado terrorista por la UE, lanzara un ataque sin precedentes contra Israel.
El domingo, que es el primer día de la semana en Israel, se observó una notable reducción de la actividad en las calles de Jerusalén y otras ciudades. Partidarios del primer ministro Benjamin Netanyahu y de la extrema derecha criticaron duramente el movimiento. "Bloquear las principales carreteras de Israel y perturbar la vida de los ciudadanos es un grave error y una recompensa para el enemigo", lamentó el ministro de Cultura, Miki Zohar.
El mismo Netanyahu condenó las movilizaciones, indicando que esto ayuda a Hamás porque "están garantizando que los horrores del 7 de octubre se repitan y que tengamos que librar una guerra interminable". "Tanto para promover la liberación de nuestros rehenes como para garantizar que Gaza ya no represente una amenaza para Israel, debemos completar la tarea y derrotar a Hamás", afirmó.
Fuente: EFE, AFP