El domingo pasado, Roberto Paredes, un hombre que almorzaba en un restaurante en la localidad de Chimbas, San Juan, atacó con un cuchillo a “Topo”, un cachorro que jugaba en la vereda junto a otros niños y un caniche, perro del propio agresor.
Sin previo aviso y en lo que se describe como un "arrebato de locura", Paredes se levantó de su mesa, tomó un cuchillo y asestó un golpe mortal al cuello del cachorro. “Topo” murió desangrado en el lugar, mientras los niños, horrorizados, lloraban desconsolados al ver la cruel escena.
La reacción de los testigos y la detención del agresor
Tras cometer el ataque, Paredes regresó a su asiento como si nada hubiera ocurrido, lo que permitió a los testigos alertar rápidamente a la policía. El hombre fue detenido en el lugar y trasladado a la comisaría.
A pesar de los esfuerzos de los vecinos, que llevaron al cachorro a una veterinaria cercana, “Topo” no logró sobrevivir debido a la gravedad de las heridas. La Fundación Patitas Sin Hogar, junto al veterinario que atendió al animal, presentaron la denuncia penal correspondiente.
El fiscal Luis Bonomo ya tomó el caso, que se investiga bajo la carátula de maltrato animal según la Ley 13.346, que protege a los animales de actos de crueldad. Paredes podría enfrentar hasta un año de cárcel, aunque organizaciones protectoras de animales exigen una condena ejemplar.
La Fundación Patitas Sin Hogar relató lo sucedido en redes sociales, describiendo el horror que vivieron los niños y denunciando el peligro que representa Paredes para la sociedad. “Era un hombre agresivo. Un peligro para todos. Solo pedimos justicia por Topo, el compañero de juego de los chicos, que tuvo la mala suerte de cruzarse con un asesino”, expresaron en su publicación.