La relación entre Argentina e Israel volvió a tomar impulso con la visita a Buenos Aires del canciller israelí Gideon Sa’ar, encuentro que profundizó el acercamiento político y económico entre ambos gobiernos y dejó definiciones clave para los próximos meses. La principal confirmación fue que la embajada argentina será trasladada de Tel Aviv a Jerusalén durante el primer semestre del año próximo, una decisión que ubica al país dentro del reducido grupo de naciones que reconoce formalmente a Jerusalén como capital israelí.
El presidente Javier Milei reafirmó que participará en la inauguración de la nueva sede diplomática y que el traslado se concretará con una visita oficial prevista para abril o mayo. Previamente, el canciller Pablo Quirno viajará a Israel para avanzar con los preparativos. La medida se alinea con la postura del gobierno argentino en votaciones internacionales, donde ha acompañado de manera consistente las posiciones de Estados Unidos e Israel.
El movimiento diplomático se produce en un contexto en el que la mayoría de los países mantiene sus embajadas en Tel Aviv para evitar pronunciarse sobre la disputa territorial entre israelíes y palestinos. Actualmente, solo Paraguay, Estados Unidos, Honduras, Guatemala y Papúa Nueva Guinea tienen representación diplomática en Jerusalén. Con el traslado, Argentina se sumará a ese grupo, aunque mantiene el reconocimiento del Estado Palestino, vigente desde 2010.
La visita de Sa’ar también apuntó a fortalecer el vínculo económico. En Buenos Aires participó del Foro Económico Argentina–Israel, que reunió a más de 60 empresas de ambos países y dio lugar a la firma de un acuerdo marco entre la Unión Industrial Argentina y su contraparte israelí. El canciller israelí destacó la intención de su país de incrementar inversiones y abrir una oficina de negocios en Argentina durante el próximo año. “La relación es extraordinaria. Argentina estuvo con Israel en momentos muy difíciles”, señaló.
Otro de los avances anunciados fue la posibilidad de habilitar una ruta aérea directa entre Buenos Aires y Tel Aviv, que sería operada por la aerolínea israelí El Al. Según Sa’ar, ya comenzaron los pasos iniciales para evaluar su apertura y podrían surgir novedades en los próximos meses.
El intercambio comercial entre ambos países muestra indicadores relevantes: Israel es actualmente el segundo destino más importante para la carne kosher argentina, mientras que exporta al país tecnología y software.
La agenda bilateral dejó así una serie de definiciones que consolidan el rumbo del gobierno argentino en materia de política exterior y abren, al mismo tiempo, la puerta a nuevos acuerdos económicos y logísticos.