La diputada de Pro por Chaco, Marilú Quiroz, organizó en el auditorio del Anexo A de la Cámara de Diputados una jornada titulada “¿Qué contienen realmente las vacunas?”, que duró más de seis horas y estuvo marcada por la difusión de posturas antivacunas y datos cuestionables.
Durante el evento, médicos y otros invitados expusieron opiniones que generaron rechazo entre legisladores de distintos bloques, debido al riesgo que implica difundir información sin fundamentos científicos. Entre los temas abordados figuraron supuestas relaciones entre vacunas y autismo, así como teorías sobre magnetismo y efectos adversos no comprobados de la vacuna contra el Covid-19 de AstraZeneca.
En uno de los paneles, Lorena Diblasi presentó a un hombre que afirmó sufrir "secuelas" como la "magnetización" tras recibir la vacuna, sin aportar pruebas. Además, se afirmaron ideas como que la pandemia fue "un invento" y que las vacunas constituyen "un negociado". También se mencionaron supuestos excesos de aluminio en sangre de personas vacunadas.
Un evento no avalado por el Colegio de Médicos
Esta convocatoria despertó un amplio repudio. El Colegio de Médicos, a través de una carta firmada por Rubén Tucci enviada al ministro de Salud Mario Lugones, solicitó la suspensión del evento advirtiendo que podría generar desconfianza en la comunidad y afectar la percepción sobre el valor de las vacunas.
El escrito destacó que la jornada representa “un enorme peligro”, especialmente en un contexto donde las tasas de vacunación son alarmantemente bajas y enfermedades previamente controladas están resurgiendo con fuerza.
De manera similar, la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE) envió una carta al Congreso solicitando la cancelación del acto, calificándolo como una actividad que atenta contra la salud pública al poner en duda la eficacia y seguridad de las vacunas.
En redes sociales, Pablo Yedlin, presidente de la Comisión de Salud en la Cámara baja, criticó duramente el evento: “Mientras Argentina tiene las coberturas de vacunación más bajas de la historia, casos de sarampión, niños muertos por Coqueluche, en Diputados hacen este circo”. Además, relató que solicitó a Martín Menem la cancelación, pero no obtuvo respuesta.
Ángela Gentile, presidenta de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaln), también se manifestó durante una reunión conjunta de comisiones legislativas que coincidió con el evento. Gentile señaló que “cuando uno hace reuniones que atentan contra la seguridad en vacunas está en cierta forma haciendo impacto en el calendario nacional de inmunizaciones” y advirtió que la comunidad comienza a dudar pese a la amplia evidencia de que las vacunas salvan vidas.
Ante la polémica, Marilú Quiroz defendió la organización del acto y explicó que la iniciativa nació de inquietudes personales y de profesionales de la salud que querían compartir sus investigaciones, en medio de una pandemia que dejó muchas secuelas. La diputada sostuvo que el evento no fue un planteo aislado y que varios legisladores comparten esas preguntas.
“Es difundir, dar a conocer, permitir que se exprese la voz de un sector”, afirmó y cuestionó a sus pares que pidieron suspender la jornada: “Creo que se confunden en el rol que debe tener el Congreso. Debemos ser la voz del pueblo. Y claramente hay un sector de la sociedad que siente desconfianza y tiene temores”.
Quiroz agregó que muchos argentinos tienen dudas sobre los efectos de algunas vacunas y que este tipo de encuentros es una oportunidad para despejarlas y conocer estudios en desarrollo. En relación con las vacunas contra el Covid-19, mencionó que existen casos en el mundo de efectos adversos y que estos fármacos se aprobaron en tiempos excepcionales, con posibles efectos futuros desconocidos.
La legisladora también admitió conocer experiencias desfavorables, incluso una personal, aunque prefirió no ahondar en detalles. Subrayó la importancia de que el Congreso permita la discusión abierta de todas las voces y lamentó que se hayan intentado cancelar las charlas: “Siempre hubo sectores que buscaron sostener un único relato oficial, sin interés alguno en escuchar voces calificadas”.
Finalmente, Quiroz pidió que la discusión no se convierta en polémica estéril y llamó a trabajar con humildad y respeto para lograr una mejor calidad de vida, defendiendo la necesidad de abrir espacios para quienes tienen perspectivas diferentes.