Cada 21 de septiembre, los jóvenes argentinos celebran el Día del Estudiante, una jornada que reconoce su dedicación a la educación secundaria, terciaria y universitaria. Tradicionalmente, este día las instituciones educativas suspenden las clases, aunque no se trata de un feriado nacional obligatorio para todos.
Este año, la fecha coincide con un domingo, lo que generó consultas sobre un posible traslado del asueto al lunes 22. Las autoridades educativas fueron claras: no habrá corrimiento, ya que se trata de un asunto exclusivo del ámbito escolar y no figura entre los feriados nacionales trasladables.
Origen del Día del Estudiante
El 21 de septiembre no se eligió por el inicio de la primavera, sino por su vinculación con Domingo Faustino Sarmiento, reconocido como el “padre del aula”. Tras su fallecimiento en Asunción, Paraguay, el 11 de septiembre de 1888, sus restos llegaron a Buenos Aires diez días después. En honor a esta fecha, se instauró el Día del Estudiante como una manera de valorar la educación y la formación de los jóvenes.
Desde entonces, cada 21 de septiembre, colegios secundarios, universidades e institutos terciarios interrumpen sus actividades para celebrar a los estudiantes y resaltar la importancia del aprendizaje.
Qué pasará este año
El hecho de que este año la fecha caiga en domingo no modificará la rutina laboral ni escolar del lunes siguiente. Al tratarse de un asueto escolar parcial, solo aplica a las instituciones educativas y no se traslada a los días hábiles posteriores, a diferencia de los feriados nacionales reglamentarios.
Así, los estudiantes deberán esperar a la primavera y a la conmemoración oficial del 21 de septiembre para disfrutar de su jornada, aunque en 2025 coincida con el fin de semana.