Este domingo 7 de septiembre, millones de bonaerenses acudirán a las urnas para definir representantes legislativos y autoridades municipales. En total, se renovarán 46 diputados y 23 senadores provinciales, junto con concejales y consejeros escolares en los distintos municipios. La jornada se desarrollará en las ocho secciones electorales bonaerenses, de manera desdoblada respecto de las elecciones nacionales, previstas para el 26 de octubre.
Cambios en el voto nulo y en blanco
Debido al desdoblamiento electoral, la provincia modificó el sistema de conteo de votos, aplicando los lineamientos de la Ley electoral provincial 5.109. Esta normativa establece tres categorías de votos: afirmativos, en blanco y de identidad impugnada. El voto nulo no forma parte de esta clasificación.
La ley detalla que si se encuentran varias boletas en un mismo sobre y pertenecen al mismo partido, se contará solo una; si corresponden a listas diferentes, el voto se considerará en blanco. También serán considerados votos en blanco los sobres con boletas ilegibles, sin nombres válidos de candidatos o con listados múltiples cuyo orden no pueda determinarse, así como aquellas papeletas que permitan identificar al votante.
Diferencias con las elecciones nacionales
El Código Electoral Nacional define el voto en blanco como aquel donde la persona no marca ninguna preferencia electoral, mientras que el voto nulo aplica en situaciones específicas, como boletas no oficializadas, con más de una marca o con inscripciones ajenas a la elección. Ambos tipos se registran en el acta de escrutinio, pero no se computan para el cálculo del cociente electoral según el Artículo 109 de la ley provincial.
Cómo será el escrutinio en la provincia
El escrutinio definitivo comenzará con el análisis de los sobres marcados como “impugnados”. La impresión digital del votante será verificada por peritos, quienes compararán los datos con los registros oficiales. Si la identidad no se confirma, el voto se descarta; de lo contrario, se incorpora al cómputo. Los sobres se mezclarán y abrirán de manera simultánea para garantizar la confidencialidad.
A diferencia del sistema nacional, que utiliza D’Hondt, la provincia aplicará el método Hare para distribuir los escaños en la Legislatura y los Concejos Deliberantes, priorizando la proporcionalidad según el cociente electoral. Bajo este esquema, incluso un decimal puede definir un concejal más o menos, por lo que el recuento definitivo será fundamental para asegurar la transparencia y exactitud de los resultados.