Se casó con una muñeca y se separó pronto por una falla

La noticia trascendió al conocerse que el hombre decidió separarse de su pareja sentimental, una muñeca de plástico llamada Margo, con la que se casó en noviembre del año pasado en una ceremonia que tuvo lugar en Kazajistán, aunque el hombre comentó que antes de formalizar la relación estuvo “saliendo” con la muñeca durante un año.

Yuri Tolochko, es el fisicoculturista protagonista de la historia que se volvió viral en las redes sociales desde el año pasado por cuenta de su particular matrimonio, aunque muchos de los cibernautas seguidores de sus historias, no imaginaron que el vínculo matrimonial entre ambos duraría tan pocos meses.

El deportista publicó en sus redes sociales varias fotografías y videos sobre los viajes, fiestas y actividades que realizó en compañía de Margo, aunque quizá lo que más llamó la atención es la razón por la que Tolochko decidió terminar con su matrimonio.

Según explicó, su relación con la muñeca llegó a su fin debido a que ella sufrió daños en su material de fabricación y tuvo que ser enviada durante un tiempo a otra ciudad para solucionar las fallas. Dijo también que se sintió “devastado” y que la soledad lo afectó mucho, por lo que prefirió cortar la relación de raíz.

En el mismo contexto, comentó que ya tiene el reemplazo de Margo, ya que decidió adquirir rápidamente otra muñeca de plástico llamada Lola, con quien ya convive en su hogar. “Déjenme presentarles a mi nueva esposa, Lola. Aún no he decidido sobre su identidad sexual y de género”, publicó recientemente el hombre en su cuenta de Instagram en la que ya acumula más de 100 mil seguidores.

Durante la publicación de un video, Yuri Tolochko adelantó que “Además de Lola, puede que tenga otra esposa”, mientras presentó por primera vez a su nueva pareja, mientras el mismo mensaje indicaría que próximamente podría comprar más muñecas.

Este tipo de situaciones, ha sido clasificados bajo la categoría de "agalmatofilia", que hace referencia a personas que sienten atracción sentimental y sexual hacia objetos inanimados, por ejemplo, muñecas de plástico, estatuas y maniquíes.

El auge de las relaciones con muñecas sexuales

Sin dudar que esto es algo que también provocó la pandemia contribuyendo a un incremento del mercado de las muñecas sexuales, tanto así que ahora buscan que la tecnología de inteligencia artificial (IA) asemeje sentimientos y reflexiones íntimas para satisfacer mejor a sus compradores.

En este sentido, la compañía tecnológica RealDoll, con sede en California, Estados Unidos, es considerada una de las principales fábricas de los robots más parecidos a los seres humanos que se consigan en el mercado. De acuerdo a los dichos de sus diseñadores, sus robots son inspirados en tecnología usada por Hollywood para darles “vida” a sus muñecas de silicona, pero su verdadera innovación es el desarrollo de inteligencia artificial para que sean más que un juguete sexual.

Al mismo tiempo, destaca que la muñeca Nova, su último diseño, captó la atención de la prensa internacional por su capacidad de reflexionar sobre temas de interés humano. Según la compañía fabricante, ante el temor por coronavirus, la necesidad del distanciamiento social y la dependencia cada vez mayor de la tecnología, es que inventaron este robot que no solo tiene una función sexual, sino que puede “conversar” con su propietario y reflexionar sobre temas que van desde religión hasta psicología y ética.