Pesaba 230 kilos, prometió ponerse en forma y el resultado es viral

Vicente Gómez, un hombre de 75 años con un serio problema de obesidad, se convirtió en el protagonista de una emocionante historia de superación personal que cautivo a miles en las redes sociales.

Con un peso de 230 kilos y una movilidad reducida que lo mantenía confinado entre la cama y el baño, Vicente enfrentaba un gran desafío: prometió a sus nietos que perdería peso para poder bailar en sus bodas.

Este compromiso, compartido por su nieto Juan Ignacio Sajtroch en X, desató una ola de apoyo y admiración hacia Vicente, quien ahora es conocido cariñosamente como "Tito" por sus seguidores en línea.

"Mi abuelo tiene 75 años y tiene un problema de obesidad serio. Hace como 2 años que no se mueve mucho, va de la cama al baño y del baño a la cama. Este año 2 de sus nietos nos casamos y nos prometió que iba a ponerse bien para poder bailar”, compartió Juan Ignacio, iniciando la viralización de esta conmovedora travesía.

La respuesta del público no se hizo esperar: los videos de Vicente bailando y mostrando su progreso acumularon más de 5 millones de vistas. "Se han viralizado tanto los videos míos, hay 5 millones de vistas", afirmó Vicente, agradecido por el apoyo recibido.

Un camino hacia la salud y la felicidad

La determinación de Vicente por cumplir su promesa se hizo evidente de inmediato. Poco después de hacer la promesa, comenzó a enviar videos a sus nietos mostrándose moviéndose por la casa, incluso realizando tareas simples como lavar los platos, un logro notable dada su condición previa.

"Me comprometí a adelgazar para poder danzar en la boda de mi nieto. Gracias al respaldo de mis nietos virtuales, logré moverme al ritmo de la música", señaló, mientras se le observa utilizando un andador para “tirando unos pasos”, y también compartiendo un vals con la novia en lo que sería el primero de dos enlaces matrimoniales de sus nietos este año.

Esta transformación no solo implicó un cambio físico, sino también un ajuste en su mentalidad, según relató Juan Ignacio a 'Todo Noticias'.

Entre enero y febrero, Vicente logró perder 10 kilos, alcanzando su meta de bailar en el matrimonio de uno de sus nietos. Sin embargo, su viaje no termina ahí, ya que tiene previsto seguir adelgazando para la boda de Juan Ignacio el 26 de julio.

Vicente, quien tuvo una infancia difícil marcada por la pobreza, atribuye su obesidad a las privaciones sufridas durante esos años. Ahora, casado desde hace 50 años y padre de cinco hijos, logró una estabilidad económica y es propietario de un geriátrico.