Cada vez que se acerca un martes 13, la conversación se vuelve inevitable: ¿hay que tener cuidado? ¿Es solo una superstición? Esta fecha, envuelta en misterio y tradiciones populares, sigue generando dudas, bromas y hasta decisiones postergadas. Pero más allá del mito, muchas personas optan por tomar recaudos, aunque sea simbólicos, para transitar este día con más tranquilidad.
El famoso dicho “no te cases ni te embarques” refleja el espíritu de cautela que rodea al martes 13. No es raro que se eviten compromisos importantes, firmas de contratos o viajes en esta fecha. La idea de que puede traer mala suerte está tan arraigada que incluso quienes no se consideran supersticiosos, a veces, prefieren no arriesgarse.
El número 13 ha sido considerado desafortunado en distintas culturas. Desde la mitología escandinava hasta pasajes bíblicos, aparece vinculado con el caos y la traición. Si a eso se le suma que el martes es el día de Marte —dios romano de la guerra—, la combinación se vuelve temida. Así nació esta fecha tan particular, con fama de conflictiva y llena de advertencias.
Ahora bien, ¿qué se recomienda hacer o evitar durante un martes 13? Para quienes creen o simplemente no quieren tentar al destino, las medidas van desde evitar decisiones trascendentales hasta hacer limpieza energética en casa. También se aconseja usar amuletos, evitar discusiones y no comenzar proyectos nuevos sin planificación previa.
En el plano astrológico, este martes 13 de mayo de 2025 llega con la Luna en Virgo, lo cual puede ser positivo para ordenar, reflexionar y cerrar temas pendientes. Algunos astrólogos sugieren enfocarse en tareas que requieren atención al detalle y evitar actuar por impulso, ya que Marte sigue marcando su impronta de intensidad.
Hay quienes aprovechan esta fecha como una oportunidad para conectarse con su intuición. Encender una vela blanca, hacerse una limpieza con sal gruesa o simplemente meditar puede servir como ritual personal para atravesar el día en paz. También es buen momento para agradecer, soltar lo que ya no va y recargar energía.
Aunque no hay evidencia científica que avale los malos augurios, el martes 13 sigue presente en el inconsciente colectivo. Por eso, tomar pequeñas precauciones puede ser más un gesto de autocuidado que una verdadera prevención frente al “infortunio”.
En definitiva, cada quien decide cómo vivir esta jornada. Ya sea con humor, con respeto por la tradición o con un toque de misticismo, lo cierto es que el martes 13 sigue siendo un día especial. ¿Y vos? ¿Vas a hacer algo diferente?