El conductor se dirigió a Neuquén para ver a su hija procedente desde Bariloche. Sin embargo, la velocidad en que iba el dueño del vehículo hizo que la policía tomara cartas en el asunto y lo detuvieran ya que arrojó 1,5 gramos de alcohol en sangre.
El hombre, que iba a bordo de una Toyota Hilux, recorrió 380 kilómetros en estado de ebriedad. Por lo que fue detectado por los efectivos policiales que rápidamente actuaron y detuvieron a esta persona.