Mauro Sebastián León y su hermano Damián Francisco Calleque, hijos de un efectivo policial y acusados del asesinato de Franco Merluccio, ocurrido en el barrio Melipal, seguirán bajo el régimen de prisión domiciliaria, según lo dispuso este miércoles un tribunal de Revisión. Los imputados aún no tienen un domicilio donde cumplir con la domiciliaria y permanecen alojados en una comisaría.
La fiscal de Homicidios, Sandra Ruixo, solicitó en una audiencia por zoom que se modifique la medida de coerción que los hermanos León y Calleque porque “no poseen al día de la fecha un domicilio en el cual cumplir la prisión domiciliaria” y también que permanecen vigentes los riesgos procesales por los cuales fue impuesta la medida.
El tribunal revisor encargado de resolver la modalidad de cumplimiento entendió que efectivamente “siguen vigentes los riesgos procesales” por los cuales se fijó la prisión domiciliaria, pero no hizo lugar al pedido de la fiscalía. De esta manera, ambos imputados seguirán detenidos en una comisaría hasta que fijen un domicilio en el cual puedan cumplir con la prisión domiciliaria.
El delito por el cual Calleque y León fueron acusados en una audiencia de formulación de cargos, donde también se les impuso la prisión domiciliaria basada en el peligro procesal de entorpecimiento de la investigación, es homicidio simple en carácter de coautores.
En la audiencia de formulación de cargos la fiscalía consideró que, de permanecer en libertad, los acusados podrían influir o amedrentar a los testigos del hecho, ya que todos viven en un radio cercano. Por este motivo la jueza de garantías que intervino fijó la medida por ocho meses, plazo requerido por Ruixo y Sola.