Los ánimos continúan calientes dentro de la Policía, mientras los familiares de los policías activos reclamaron frente a las distintas regionales de la provincia y en Bariloche hasta se inició un acampe. Se conocieron radiogramas en los que autoridades de distintas comisarías aprietan a sus empleados para que no se sumen a las protestas e incluso les prohíben pertenecer a grupos de whattsapp donde se traten esos temas, y en caso de desobediencia, "serán sancionados".
Desde que se conoció el aumento dispuesto por el gobierno rionegrino a la fuerza, sin especificar el porcentaje y sólo haciendo público un piso salarial de 40 mil para un suboficial ingresante y 46 mil para un oficial sin antigüedad, las reacciones no fueron las esperadas. Los montos establecidos son bastante más bajos de los 70 mil pesos de bolsillo que reclaman en las calles. Otro punto de debate y que será tema de debate los próximos encuentros entre algunos referentes policiales y la cúpula, son los items que cobran como bonificaciones.
Hasta agosto, un agente ingresante tenía un sueldo de 32 mil pesos, más presentismo y casa, que a quienes lo cobraban les significaba unos 2 mil pesos mensuales. El tema del presentismo, que representa unos 3.000 pesos, es un debate planteado históricamente, ya que es un plus salarial que si un policía se enferma y falta, deja de cobrarlo.
éste mediodía, como estaba planteado, familiares de los policías en servicio reclamaron en la Jefatura de Policía en Viedma y en las diferentes regionales, como Roca, Cipolletti y Bariloche. Donde volvieron a expresar la necesidad de "sueldos dignos", además de reglamentar la cantidad de horas de trabajo, ya que actualmente los "recargos" son dispuestos por el Jefe de la unidad de acuerdo a la necesidad y no se pagan.
Ya trascendió, que independientemente cuál sea el desenlace del conflicto, cada Jefe tiene preparada una lista con los nombres del personal que adhirió a la protesta. Si bien, dentro de las negociaciones estará planteadas las sanciones administrativas, se sabe que dentro de la fuerza los traslados son utilizados para adoctrinar a los insurrectos.