Fue a juicio por homicidio y lo condenan por lesiones graves

En octubre de 2021, Elías Nahuel Canales Jiménez fue a un domicilio de Plottier para comprar drogas “fiado”. La fallida transacción terminó con el vendedor, Fernando Agüero, golpeándolo en el cráneo con una pala.  Luego discutió con su hermano quien lo golpeó en la cabeza con un casco. Y finalmente, aturdido por los golpes, se cayó de la moto en la esquina y volvió a golpearse la cabeza. Murió al día siguiente por las gravísimas lesiones recibidas en el cráneo.

Agüero fue llevado a juicio acusado de “homicidio simple en grado de tentativa” ya que la víctima “murió tras ese ataque pero que también sufrió otros golpes que no fueron responsabilidad del condenado”, según el fiscal Andrés Azar.

El tribunal, integrado por Federico Sommer, Richard Trincheri y Luis Giorgetti, emitió el fallo de manera dividida. Sólo uno de los jueces se inclinó por declarar a Agüero culpable del delito que planteó el fiscal. La mayoría, optó por “lesiones graves en carácter de autor”.

Los jueces que emitieron el fallo por mayoría, consideraron que el agresor “no tuvo la intención” de matar, por lo que descartaron la figura del homicidio.

Durante el juicio, la fiscalía sostuvo que la agresión que se podía atribuir al imputado, Fernando Agüero, se produjo el domingo 24 de octubre de 2021. Cerca de las siete menos cuarto de la tarde, la víctima, Elías Nahuel Canales Jiménez, se presentó en una vivienda de un barrio de Plottier para comprar drogas, aunque sin contar con el dinero para hacerlo.

En ese momento llegó al lugar un familiar de Canales Jiménez y comenzó una discusión, a la que se sumó el imputado, que salió de la vivienda y agredió con una pala a la víctima. Junto a su hermano, Canales Jiménez se fue en moto, pero a los pocos metros cayeron, y en ese contexto, el hermano lo golpeó con el casco en el cráneo. La víctima se pudo reincorporar y retomar la huida en la moto, esta vez sólo, pero dos cuadras después volvió a caer y a golpearse en la cabeza.

 Canales Jiménez fue asistido en el lugar y trasladado al hospital de Plottier primero y, luego, al Castro Rendón, en donde murió al día siguiente, producto del conjunto de lesiones que sufrió en el cráneo.