El audaz robo de una joyería a apenas dos cuadras de la Comisaría 4°, la más importante de Cipolletti, ocurrió mientras toda la Policía de la ciudad se encontraba en el sector norte, en un tiroteo en las 200 viviendas. Los investigadores creen que los ladrones manejaban esa información por eso actuaron de manera impune, pese a quedar registrados en las cámaras de seguridad y la activación inmediata de la alarma.
El hecho sucedió a las 0:45, mientras todos los uniformados de servicio de Cipolletti y de ciudades vecinas se encontraban controlando un tiroteo en jurisdicción de la Subcomisaria 79°, tras el hallazgo de un pibe de 18 años ahorcado.
La situación se fue calentando y los tiros se escuchaban en varios sectores, por eso debieron solicitar refuerzos para contener la situación. Es que desde el núcleo del joven muerto, hicieron correr la versión de que el hecho tenía relación con un supuesto ajuste de cuentas de una banda narco, con la que existe un enfrentamiento por la disputa territorial en la venta de drogas.
Sin policías disponibles en la ciudad, más la imposibilidad de patrullar de los dos nuevos móviles entregados a la Comisaría 4°, por falta de personal para afectarlo a los recorridos de prevención, se gestó el audaz robo en la joyería Daniels, ubicada a apenas dos cuadras de la unidad policial.
Los cinco delincuentes llegaron a bordo de una camioneta Nissan Frontier de color azul, la que estacionaron en la puerta del comercio. Cuatro hombres bajaron con diversas herramientas, pero no lograron violentar las rejas. Por esto el conductor hizo marcha atrás y derribó el tejido de protección y además hizo estallar los vidrios.
Eso permitió que ingresen y en apenas 90 segundos se llevaron todas las joyas que estaban a la venta y exhibidas en el mostrador dentro del salón. Aún no trascendió el valor estimado del botín, aunque se presume que puede alcanzar a varios millones, al tratarse de varias piezas de oro.
Para los investigadores, el robo estuvo planificado, pero que los delincuentes contaban con el dato de que al menos a la brevedad no llegaría ningún móvil policial por estar ocupados en el procedimiento en el sector norte de la ciudad. No se descarta que hayan tenido algún equipo de radio con la frecuencia policial que les establecer los movimientos de los uniformados.
Del mismo modo, se estableció que la camioneta utilizada fue robada pocos minutos antes del hecho en la joyería Daniels. Su dueño aseguró que la dejó estacionada sobre calle España, a dos cuadras del comercio, y que cuando la fue a utilizar esta mañana descubrió que no estaba, por eso hizo la denuncia correspondiente
Ahora los investigadores tratan de establecer a través de cámaras de seguridad, cuál fue la ruta que los delincuentes utilizaron para huir del lugar. Como también están casi seguros que la camioneta puede aparecer abandonada en cualquier lugar del Alto Valle.
ASÍ FUE EL ROBO DESDE ADENTRO: