Finalmente, el barilochense Néstor Soto confesó ante la Justicia ser el autor del femicidio de Catalina Gutiérrez. Según reveló su abogado Gastón Schönfeld, el joven de 21 años declaró en los Tribunales de Córdoba y reconoció haber sido el responsable de asesinar a la influencer.
Schönfeld contó ante los medios fuera de los Tribunales: "Dijo que fue él", aseguró el letrado, quien aseguró que fue una declaración breve y que se negó a responder preguntas. Llegó 10 minutos antes del mediodía y se retiró esposado media hora después de brindar su declaración: "Realizó una manifestación donde dijo que había sido él, fue breve la manifestación que hizo", agregó.
Según el portal Infobae, Soto afirmó textualmente: “Yo la maté, le arruiné la vida a Catalina, me arruiné la vida, arruiné la vida de nuestras familias y estoy muy arrepentido”. Luego de la confesión, el joven de Bariloche se fue esposado al penal de Bouwer donde está recluido días después de haber confesado el crimen inicialmente en la comisaría: después, la estrategia de la defensa incluyó negar rotundamente la responsabilidad del hecho, pero el femicida decidió admitir el hecho.
Lo que se sabe del femicidio de Catalina
Catalina Gutiérrez, de 21 años, vivía con su familia en el barrio Inaudi de la capital cordobesa. La noche del 17 de julio, salió de su casa alrededor de las 21:00 y poco después dejó de responder a los mensajes. Según los investigadores, aproximadamente a las 21:30, Catalina llegó al departamento de Soto en la calle Podestá Costa para buscarlo y dirigirse juntos a una reunión con amigos de la facultad en el shopping Patio Olmos.
En el departamento de Soto, se habría producido una pelea y un forcejeo que terminó con Catalina golpeada y estrangulada. A las 22:20, otro video obtenido por El Doce registró el Renault Clio de Soto circulando por avenida Valparaíso, en el cruce con calle José Guardado. Los investigadores creen que en ese momento, Catalina ya estaba inconsciente o posiblemente muerta.
Soto abandonó el vehículo en la calle Pedro Echagüe del barrio Ampliación Kennedy e intentó prenderle fuego para eliminar evidencias. Durante la madrugada, gracias al rastreo del celular de Catalina, sus familiares y amigos encontraron el coche y hallaron su cuerpo sin vida en el asiento trasero.