Un femicidio conmocionó al oeste bonaerense este viernes, en el que una mujer de 51 años fue encontrada sin vida con signos de haber sido estrangulada y golpeada. Su cuerpo estaba cubierto con una sábana, en su vivienda de calle Newton al 3300 de la localidad de Moreno. La Policía de Buenos Aires no tiene pistas de la identidad de su agresor, que está prófugo.
La mujer fue identificada como María Morales, de 51 años de edad, y trabajaba como empleada de una cooperativa. Según las primeras informaciones, habría conocido a un hombre por medio de una aplicación de citas y lo habría citado a su domicilio.
Su hija llamó al 911, preocupada porque no sabía nada de su madre desde el día anterior. dado que no respondía llamadas ni mensajes.
El macabro hallazgo
Cuando las fuerzas policiales llegaron a la vivienda de Morales, advirtieron que la puerta principal estaba abierta y sin signos aparentes de haber sido forzada. Al ingresar, notaron que todos los muebles del living estaban desordenados.
Al llegar a la habitación, encontraron el cuerpo de María en el suelo, al lado de su cama. Estaba semi desnuda, y según los informes preliminares presentaba signos de abuso sexual, que fueron confirmados por los peritos posteriormente.
La cabeza de la mujer estaba cubierta por una sábana salpicada de sangre: “Es un hecho horrible, hacía rato que no veía algo semejante”, describió un investigador al portal Primer Plano Online.
Además, el cuerpo de Molares tenía golpes y se determinó que la causa de muerte fue por insuficiencia respiratoria por asfixia mecánica, provocada por una estrangulación manual combinada con un lazo, informó la autopsia posterior.
La fiscal Luisa Pontecorvo, a cargo de la Fiscalía Nº3 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, solicitó la presencia de la Policía Científica para recolectar huellas y revisar las grabaciones de cámaras de seguridad para identificar al agresor, que continúa prófugo.
También pidió a la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado (DAJUDECO) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que analice los movimientos del teléfono de la víctima, sus comunicaciones, su ubicación geográfica y el impacto de las antenas para avanzar en la investigación.