Un auto con cuatro hombres armados fue detectado por el sistema de Anillo Digital en Buenos Aires y, en cuestión de minutos, se desató una feroz persecución policial que terminó con un delincuente muerto, tres detenidos y un auto volcado en plena colectora de la General Paz, a la altura de Villa Celina.
Lo que parecía un operativo de rutina reveló algo más grave: todos los ocupantes tenían antecedentes penales y uno de ellos era un prófugo buscado por homicidio.
Se trata de Eduardo Miguel Ajalla Cabrera, más conocido como “Calabaza”. Según fuentes policiales, llevaba años en la mira de la Justicia: está acusado de asesinar a Carlos Molina en 2021, durante una supuesta operación de compra de dólares dentro de un departamento en Almagro. Desde entonces, estaba prófugo.
Los otros dos detenidos también tienen causas por robo, igual que el cuarto integrante, quien murió tras el enfrentamiento armado con la policía.
El operativo comenzó cuando el sistema de seguridad detectó el auto —con pedido de secuestro— en circulación hacia el sur. Un patrullero intentó interceptarlo, pero los ocupantes aceleraron y comenzaron a disparar. La persecución se extendió por varias cuadras hasta que el vehículo perdió el control, volcó y terminó en medio de la calle, cerca del cruce de Bustamante y Chilavert.
Comerciantes de la zona grabaron el momento y mostraron el auto destrozado. La escena fue rápidamente rodeada por efectivos de la Policía de la Ciudad y la Federal. Una ambulancia del SAME asistió a los heridos mientras Policía Científica levantaba pruebas en la zona, donde se mantuvo el tránsito cortado por varias horas.
La investigación quedó a cargo de la UFI de Homicidios de La Matanza, que ahora intenta determinar quién disparó, cómo se planificó la fuga y qué vínculos existían entre los cuatro delincuentes.
La persecución no solo terminó con una muerte. También cerró la búsqueda de un homicida que llevaba casi tres años prófugo, oculto detrás de una banda que intentó escapar sin éxito.