Un crimen brutal conmocionó a Florencio Varela luego de que un hombre de 31 años, identificado como N.S.C., citara al novio de su ex pareja y lo asesinara con un machete casero tras una violenta discusión. La víctima, Cristian Eleazar Gómez Núñez, de 32 años, murió en el acto después de recibir dos puñaladas en el tórax y el corazón. El agresor quedó aprehendido y afronta una imputación por homicidio simple.
El ataque ocurrió en la vivienda del acusado, adonde Cristian llegó acompañado por su hermana después de que N.S.C. insistiera durante todo el día para que fuera a “hablar” sobre una supuesta agresión al hijo de cinco años que comparte con su ex pareja. Según relató la familia de la víctima, ese conflicto habría sido utilizado como excusa para tenderle una emboscada, alimentada por los celos del acusado ante la nueva relación de la mujer.
Georgina, la madre de Cristian, aseguró que su hijo estaba iniciando una convivencia con su novia, un proyecto que habría provocado la furia de N.S.C., quien comenzó a hostigar a la mujer y a acusar falsamente a la víctima de maltratar al niño. La mujer sostuvo que el crimen fue premeditado: mientras el menor estaba con él, el acusado “afilaba cuchillos y decía que era un juego”, en alusión a lo que planeaba hacer.
La tensión escaló cuando Cristian decidió acudir a la casa del agresor para aclarar las acusaciones. Allí se produjo una discusión y, según el relato de los investigadores, N.S.C. lo atacó frente a la hermana de la víctima con un machete que él mismo había modificado y afilado. El acusado no intentó huir y justificó su conducta repitiendo que “nadie le pega a su hijo”, pese a que un examen médico posterior determinó que el niño no presentaba lesiones.
En la escena, la Policía secuestró los teléfonos del agresor y de la víctima, que serán analizados en los próximos días. El fiscal Federico Pagliuca, a cargo de la UFI N°5 Descentralizada de Florencio Varela, pidió al juez Adrián Marcelo Villagra convertir la aprehensión en detención mientras avanza el análisis de cámaras de seguridad y se intenta dar con el arma homicida, que aún no fue encontrada.
La familia de Cristian exige justicia y sostiene que todo el episodio fue un plan elaborado por el acusado para eliminar a quien hoy ocupaba un lugar central en la vida de su ex pareja.