Desde el 18 de febrero de este año, las causas vinculadas al narcotráfico ya no son tratadas por la Justicia Federal en Neuquén, sino que pasaron a jurisdicción provincial. En ese nuevo marco de regionalización de las causas por drogas, la Policía de Neuquén viene reforzando los controles preventivos en zonas clave, como los accesos cordilleranos al territorio. Un reciente video difundido por la fuerza muestra cómo operan los caninos en los retenes.
En las imágenes, se observa a los perros entrenados para detección de estupefacientes trabajando con precisión y rapidez, bajo la supervisión de agentes especializados. Revisan vehículos particulares y colectivos en puntos estratégicos del sur neuquino, donde se articulan rutas nacionales y caminos fronterizos. El procedimiento se basa en un patrón claro: marcación, inspección y, si es necesario, apertura del vehículo.
El trabajo de los canes antidroga se volvió una pieza clave dentro del nuevo enfoque de seguridad pública provincial. Su capacidad olfativa permite detectar sustancias incluso si están ocultas en compartimentos no visibles. Esta estrategia, que se apoya en el despliegue territorial y el uso de tecnología, busca prevenir el ingreso y circulación de estupefacientes en zonas turísticas y fronterizas, donde muchas veces se intenta mover pequeñas dosis.
La regionalización del abordaje judicial permite además una respuesta más ágil ante el narcomenudeo, que se ha instalado en barrios y comunidades de la región. Mientras tanto, videos como el difundido por la Policía de Neuquén muestran no solo la labor técnica de los perros, sino también el compromiso institucional en la lucha contra el narcotráfico en el territorio.