La tragedia golpeó fuerte en el barrio 10 de Febrero en Cipolletti. El fuego consumió por completo la casilla de Luis Jara, de 72 años conocido por sus vecinos como "el chileno". El hombre quedó atrapado en el interior y fue encontrado muerto en lo que sería su dormitorio.
Pero en medio del dolor, la solidaridad no tardó en hacerse presente. Si bien las colectas barriales suelen organizarse en casos de emergencia, esta vez la iniciativa adquirió un matiz distinto: el dinero recaudado no solo busca ayudar a los afectados por el incendio, sino también a Carlos Alberto Pichún, un vecino que, en su intento por frenar el avance de las llamas, sufrió una grave fractura.
El vecino de 32 años, intentaba arrojar agua para evitar que el fuego alcanzara las casas lindantes cuando, en medio del caos y las corridas, subió al techo. Al descender, pisó una chapa mal colocada y cayó desde una altura de aproximadamente 2.50 metros. El impacto en sus pies le provocó una grave fractura en el tobillo, que lo dejó imposibilitado de desplazarse.
Actualmente, se encuentra internado y deberá someterse a una cirugía que implica la colocación de clavos y placas, cuyo costo supera los 2 millones de pesos. Sin obra social ni trabajo estable, la situación de Pichún se tornó crítica. Ante esto, un grupo de vecinas solidarias decidió iniciar una colecta para cubrir los gastos médicos y ayudarlo en su recuperación.