Un comerciante salteño que pensó que podía ganarle a la ley cruzando medio país con más de 25 kilos de droga escondidos en el tubo de GNC de su auto, fue condenado por la Justicia Federal de Roca a 5 años y 8 meses de prisión. Lo habían atrapado en mayo del año pasado, luego de una cinematográfica persecución sobre la ruta Nacional 40, que terminó con el vehículo chocado y abandonado cerca del puente El Foyel, en cercanías de El Bolsón.
Ricardo Ale Toledo, de 41 años, no solo transportaba 13 kilos y medio de marihuana y otros 11 kilos y medio de cocaína desde Salta capital, sino que lo hacía con una falsa tranquilidad: pensaba que nadie iba a revisar el tubo de gas. Pero lo que no esperaba era que en el control de Gendarmería de Río Villegas estuviera trabajando un perro antidrogas entrenado para detectar hasta el más mínimo rastro de estupefacientes.
Cuando el animal marcó el baúl del Volkswagen Vento que manejaba Toledo, el hombre entró en pánico. En vez de colaborar, se subió de un salto al auto, pisó el acelerador y salió a toda velocidad por la Ruta 40. La persecución duró unos quince kilómetros y terminó de la peor manera para él: estrelló el auto en el puente de El Foyel y huyó a pie por el bosque, dejando todo atrás.
Lo que vino después fue aún más revelador. El auto fue secuestrado y llevado a la unidad de Gendarmería. Allí, el mismo perro volvió a marcar, esta vez el cilindro de GNC del baúl. Cuando lo cortaron, apareció el verdadero cargamento: 22 panes rectangulares perfectamente embalados, listos para la venta por mayor. El pesaje posterior confirmó el hallazgo: más de 25 kilos entre marihuana y cocaína de máxima pureza.
Toledo estuvo 40 días prófugo, hasta que lo ubicaron en Salta, en una vivienda allanada por orden judicial. Fue detenido y quedó alojado en la Unidad 22 del Servicio Penitenciario Federal, en Jujuy.
El juicio oral y público se realizó en General Roca, con la fiscal general María Claudia Frezzini y su equipo como representantes del Ministerio Público. El juez federal Simón Bracco lo ocndenó a 5 años y 8 meses de prisión efectiva por el delito de tráfico de estupefacientes en la modalidad de transporte. Además, ordenó el decomiso del auto utilizado en el traslado.