Un agente del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) resultó baleado este lunes por la noche en un incidente ocurrido en un rascacielos ubicado en el corazón de Manhattan, que provocó un fuerte operativo policial en la zona.
El tiroteo tuvo lugar en el edificio número 345 de Park Avenue, en la calle 52 Este, donde funcionan las oficinas de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) y reconocidas firmas financieras como Blackstone y KPMG, según confirmaron fuentes policiales a Noticias Argentinas.
De acuerdo con los datos oficiales, el sospechoso abrió fuego en la entrada del inmueble, hiriendo al oficial de la policía y a un civil que se encontraba en las inmediaciones. Luego ingresó al edificio y se atrincheró en el piso 33, donde fue hallado sin vida tras haberse autoinfligido una herida.
Los dos heridos fueron trasladados de urgencia a centros médicos: el agente policial al Weill Cornell Medical Center y el civil al Bellevue Hospital. Hasta el momento, no se han divulgado detalles sobre su estado de salud.
La policía evacuó parcialmente el edificio y mantuvo un lockdown durante aproximadamente una hora mientras fuerzas especiales y agentes del FBI aseguraban la zona para controlar la situación.
En conferencia, la comisionada del NYPD, Jessica Tisch, informó que “la escena está contenida. El atacante ya no representa una amenaza”. Por su parte, el alcalde Eric Adams recomendó a la población evitar el área mientras continúan las investigaciones.
Por el momento, las autoridades no han confirmado los motivos detrás del ataque, aunque no se descarta que haya sido un hecho aislado sin vínculos con grupos organizados.
Esta situación generó una fuerte conmoción en la ciudad, especialmente porque la zona de Park Avenue es considerada una de las más transitadas y seguras de Manhattan.