En Roca arrancó el juicio por el homicidio de Luciano García, el joven asesinado a balazos en mayo del 2024. En las primeras audiencias hablaron las partes: fiscalía, querella y defensa, y después fue el turno de los primeros testigos, entre ellos familiares y amigos de la víctima. La sala estuvo cargada de tensión y emoción.
Según se planteó en el inicio del debate, el acusado, un muchacho de 23 años, iba en moto junto a un adolescente cuando persiguió a Luciano y a otro joven. Minutos después, en medio de la corrida, abrieron fuego y lo mataron. Desde entonces el imputado está con prisión preventiva.
Hoy declararon agentes de la Brigada de Investigaciones y un amigo íntimo de la víctima. El policía contó que Luciano había señalado dónde escondía armas un grupo que se dedicaba a las entraderas y que, tiempo después, lo culparon por la desaparición de una pistola. Esa disputa, según el testimonio, fue clave para entender por qué lo fueron a buscar y lo mataron.
El relato más duro lo dio un amigo de la infancia de Luciano, que estuvo con él hasta horas antes del crimen. Dijo que lo esperaba en la casa de su mamá cuando escuchó disparos a pocas cuadras y minutos después una vecina llegó con la peor noticia: su amigo estaba tirado en la calle, ya sin vida. También reveló que Luciano le había confesado que tenía miedo porque lo venían amenazando “los giles”, como él llamaba al grupo con el que estaba enfrentado.
El juicio seguirá durante varias jornadas con unos 30 testigos más. Las audiencias continúan el 21, 22, 26, 27, 28 y 29 de agosto, con la declaración de nuevos testigos, la incorporación de pericias balísticas y médicas, y finalmente los alegatos de las partes. Mientras la familia de Luciano reclama justicia y la ciudad sigue de cerca cada paso del proceso.