Un hombre que abusó sexualmente a lo largo de dos años de una nena de su familia fue considerado responsable de ese delito, pese a que tiene un retraso madurativo. “La condición es leve, y él era consciente del crimen que cometía” consideraron los jueces, que pedirán que se le imponga una condena de entre 8 y 20 años.
De igual manera adelantaron que su imputabilidad “está disminuida”, pero que eso sólo implicará una posible reducción en los años de prisión que finalmente decidan fijarle, en posteriores audiencias.
Abusos reiterados
Con respecto a los abusos la justicia determinó que ocurrieron en una vivienda de la ciudad de Centenario, cuando la pequeña tenía entre 9 y 11 años.
El ahora acusado convivía en el mismo lote, que era propiedad de su familia. Aprovechaba la ausencia de otros adultos para violentarla sexualmente.
En ese marco, la carátula de su caso es “abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la convivencia preexistente”. Ahora resta que se fijen nuevas audiencias, para que se defina su situación.